El invento que permite saber la cantidad de mosca blanca que habita en un cultivo

A la hora de poner en marcha técnicas de control biológico de plagas, los agricultores se enfrentan a un doble problema: saber qué dosis es necesaria para intentar detener el insecto que causa la infección del cultivo y la forma de utilizar un recurso que supone una inversión económica para el propietario de la finca. Aunque las casas de control biológico desarrollan protocolos para determinar el número de insectos beneficios que han de soltarse en el cultivo, el grado de desarrollo y la ubicación de la plaga dentro del invernadero juegan un papel fundamental en el éxito del control biológico. 

Hasta ahora, el conteo del número de insectos transmisores de plagas y enfermedades se ha hecho de forma manual o con herramientas de un ajo grado de sofisticación, lo que dificulta la apreciación real del nivel de plaga en el cultivo. Sin embargo, una empresa holandesa ha desarrollado una original solución para analizar la población de vectores de virosis mediante el análisis de las trampas cromotópicas en el interior de las fincas. 

Bajo el nombre de Scoutbox, la empresa holandesa SoilCare ha creado un novedoso sistema de detección de plagas basado en una caja que contiene una cámara digital que fotografía las trampas de colores alojadas en el interior del invernadero en las que quedan atrapados insectos como mosca blanca, trips o pulgón. 

Lo realmente novedoso es que la empresa ha desarrollado un algoritmo capaz de identificar de forma numérica la cantidad de estos insectos pegados a las trampas, con el valor añadido de clasificar las especies encontradas, algo inexistente hasta ahora. Con esta técnica, no solo se permite identificar el tamaño de las poblaciones de insectos transmisores de virus, sino también localizar con mayor precisión los focos de infección en el cultivo.