Propagación de una bacteria letal para olivos, almendros y viñedos

El cambio climático favorece la expansión de la Xylella fastidiosa

Almendro afectado por Xylella fastidiosa
Almendro afectado por Xylella fastidiosa Agricultura 2000
María José Salmerón
01:24 • 30 may. 2024

Una reciente investigación liderada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha revelado el impacto devastador de la bacteria Xylella fastidiosa, que se ve potenciado por el cambio climático, en los cultivos mediterráneos de olivos, almendros y viñedos.



El estudio, publicado en la revista científica Scientific Reports, muestra cómo el aumento de la temperatura media global exacerba la propagación de esta bacteria letal, que obstruye los conductos y tejidos vegetales, y ya ha causado la destrucción de millones de plantas.



Impacto del cambio climático



El cambio climático es un factor clave en la “impulso y distribución de las enfermedades en las plantas de todo el mundo”. El estudio analiza cuatro escenarios de crecimiento de la temperatura: 1.5, 2, 3 y 4 grados por encima de los niveles preindustriales, concluyendo que en todos ellos aumenta el riesgo de infección.



Epidemia global y pérdidas millonarias



Desde la primera detección de Xylella fastidiosa en Europa hace una década, la bacteria se ha expandido rápidamente, provocando la destrucción de cultivos en Italia y la erradicación de miles de almendros en las Islas Baleares y Alicante. En California, Estados Unidos, esta bacteria causa la enfermedad letal de Pierce en la vid, con pérdidas millonarias anuales.



Riesgo para las denominaciones de origen



El estudio también cuantifica el riesgo de infección en diferentes escalas espaciales, incluyendo países, denominaciones de origen y plantaciones vinícolas. Los datos muestran que Portugal y Grecia enfrentan el mayor riesgo de contagio en un escenario de aumento de temperatura de 1.5 grados, con un 12% y 2% más de riesgo respectivamente. Este riesgo se elevaría a un 47% y 63% con un aumento de 4 grados. Francia e Italia también experimentarían un riesgo significativo.


Las zonas con denominación de origen, como el sureste de Francia, el Penedés en España, la Bairrada portuguesa y la Toscana en Italia, se verían gravemente afectadas con un aumento de más de 2 grados, poniendo en serio riesgo sus cultivos vinícolas.


Proyecciones y futuras decisiones agrícolas

Los investigadores enfatizan la importancia de comprender la propagación de la enfermedad para gestionar mejor los recursos de prevención. A pesar de las limitaciones del modelo debido a la complejidad de los microclimas, el estudio ofrece una base crucial para que Europa tome decisiones estratégicas para mitigar los riesgos de la enfermedad de Pierce y salvaguardar el futuro de la viticultura frente al cambio climático.


Temas relacionados

para ti

en destaque