Los altavoces disonantes.

  • Sebastián Alvarez Cabrera
  • 24.04.2024

Título: Disfrutando de la Sobremesa: Un Lugar para la Conversación y la Comunidad Los fines de semana siempre han sido momentos especiales para mí. Esos días, ya sean radiantes y soleados o grises y lluviosos, tienen una cualidad única que nos reúne en la tasca del pueblo para disfrutar del merecido descanso. La sobremesa se convierte en el epicentro de la actividad, un tiempo sagrado reservado para el diálogo, las risas y la música. Últimamente, sin embargo, he notado un cambio en el ambiente. La tasca recibe más visitantes de lo habitual, lo cual debería ser motivo de celebración, pero algunos de ellos destacan de manera desagradable. Son aquellos que, con voz estridente, intentan imponer sus ideas sobre los demás, convirtiendo la sobremesa en un campo de batalla ideológico. Son los apóstoles del franquismo, aquellos que hacen apología de una dictadura pasada que dejó profundas heridas en nuestra sociedad. La sobremesa, ese espacio de encuentro y camaradería, se ve ahora empañada por discusiones acaloradas y tensiones innecesarias. La música de fondo se ve opacada por gritos de afirmaciones desfasadas y discursos que no deberí