Idiotas sin reparos
Idiotas sin reparos
Mientras las familias se estremecen ante la incertidumbre del milenarismo económico que nos azota y en el cielo se rasgan los siete sellos del apocalipsis bancario, en España quedan idiotas de guardia para animarnos los telediarios. Vaya por delante mi admiración y reconocimiento a todos ellos y ellas. Por si no lo saben, el Instituto de Cinematografía y de las Artes Audiovisuales y el Instituto de la Mujer quieren crear un nuevo organismo para la calificación de las películas. ¿Se acuerdan cuando en la cartelera se incluían recomendaciones episcopales sobre la idoneidad moral de los estrenos? Pues si la idea prospera, habremos evolucionado del "Mayores con reparos" al "Machistas con reparos" o alguna pamema por el estilo, ya que la iniciativa quiere recuperar la clasificación de las películas en función de su adaptación al discurso políticamente correcto de la igualdad decretada. Por sorprendente que parezca, estos campeones de la libertad propugnan la vuelta de comités, consejos o cualquier otra formulación inquisitorial para evaluar si la película promueve la eliminación de imágenes estereotipadas, lenguaje sexista, e impulsa "la construcción y difusión de representaciones plurales y reales de ambos sexos". De momento, no han pedido la incineración de la filmografía completa de Pajares y Esteso. Esto demuestra hasta qué punto hemos llegado a encumbrar y prestar atención en España a un no despreciable número de rebañapailas que llevan media vida pastando en el presupuesto. Qué ganas de censurar; qué ganas de prohibir; qué ganas de prescribir… ¡qué pesadez de gente!