Confieso que me quedé muy sorprendido y aturdido cuando una tarde del mes de octubre un compañero común me dio la triste noticia del fallecimiento del abogado Ernesto Ruiz Cantón el día 2 de septiembre de 2015. Evocar su figura me retrotrae a tiempos pasados, a la década de los años setenta cuando aún se luchaba por la conquista de las libertades democráticas. Acababan de legalizarse las Centrales sindicales democráticas, entre ellas, la Unión General de Trabajadores. La UGT de Almería tenía entonces su sede en un viejo tostadero de café ubicado en la calle Santísima Trinidad, muy cerca de la sede actual del Colegio de Abogados, cuando dos jóvenes letrados, Rafael Córdoba Angulo y el propio Ernesto Ruiz Cantón juraban su cargo el día 12 de junio de 1976, con los números de colegiados 762 y 761, bajo el padrinazgo de Joaquín Monterreal Alemán y Emilio Esteban Hanza. Ambos letrados fundaron el primer despacho compartido de abogados laboralistas en Almería, ubicado en los altos de la parrilla del bar Pasaje, en pleno Paseo de Almería. Por allí pasaron los principales dirigentes de algunos partidos políticos aún en la clandestinidad, cuando trataban de cerrar una alianza de partidos revolucionarios de izquierdas (PTE, MC, OIC…) y formar una candidatura para poder concurrir a las primeras Elecciones democráticas celebradas el día 15 de junio de 1977. Unos meses antes ambos letrados tuvieron un protagonismo especial cuando se produjo la muerte aciaga de Francisco Javier Verdejo Lucas, joven almeriense muerto a los 19 años de edad por un disparo de la Guardia Civil de Almería el 13 de agosto de 1976, al realizar una pintada en el antiguo balneario de San Miguel. Ernesto y Rafael formaron parte de la Comisión investigadora que creó la Asociación Democrática de la Juventud para esclarecer las circunstancias de una muerte que permanece aún impune. Pero dejemos nuestros recuerdos para dar algunos datos biográficos de Ernesto Ruiz Cantón. Había nacido en Almería el día 24 de octubre de 1951. Los estudios de Bachillerato los realizó en el Instituto de Enseñanza Media de Almería y los de Derecho en la Universidad de Granada, licenciándose en el mes de junio de 1974. El día 22 de octubre de 1977 contrajo matrimonio en Almería con Luisa María Moreno Sánchez, de cuya unión nacieron dos hijos, uno de ellos, Irene, actualmente abogada ejerciente, compartió despacho con su padre en los últimos años. Sus comienzos profesionales estuvieron vinculados al mundo laboral. A principios de 1977 ingresó en la Asesoría Jurídica Laboral de UGT, aunque ya había intervenido como abogado-asesor en varios conflictos laborales de la Transición, especialmente en la segunda huelga de pescadores (diciembre de 1976) y en la primera huelga de FOCSA (enero de 1977), siendo muy alabada su tarea de asesoramiento a los trabajadores. Tras abandonar la UGT en el año 1982, se dedicó de lleno al ejercicio libre de la Abogacía, actividad que ejerció durante cerca de cuarenta años, presentándose a las Elecciones para formar parte de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Almería en una candidatura progresista del Grupo de Abogados Jóvenes, presidida por José Murcia Ocaña, y en las Elecciones parciales de 1989 para la renovación de la Junta, sin éxito, al no salir elegido. Para mí es un honor haber compartido con él y con otros compañeros ya fallecidos (Juan Antonio González Aznar, Santiago Martínez Cabrejas, José Segura Segura…), la tarea de defender a los trabajadores de la provincia de Almería en la Asesoría Jurídico-Laboral de UGT durante cerca de seis años. Descanse en paz.