Ático de los Filabres, Senés,
primera estafeta donde viejo
nace el chavea José,
cerca de la contienda
de idénticas lajas de pizarra.
Prudencia no barrenada por la discordia.
Algarroba y almendra
sobre morales y rubio maíz;
papas bajo tierra y esquisto.
Retama y esparto.
Saca postal que vuela a galope
por quebrados y barrancos
de oscuro brillo
en dirección a la salada pleamar
con un fajo lustroso
de elocuente ambición,
dejando en la estela de la vía de agua
el factor de la lejana estación.
Cartero de savia y fortaleza,
y persistente fidelidad a la faena.
Floricultor del arriate de San Lorenzo,
con tres geranios enjaretados
al balcón siempre abierto.
Perito preclaro en días
con sombrero y bastón,
y permanente generosa sonrisa.