Querido hermano Pepe, deseo que allá donde puedas encontrarte , te llegue el sentimiento de añoranza, tanto de mí como de toda la familia, y lo que sentimos al no tener tu presencia entre nosotros.
Hoy, 30 de Diciembre, hace un año en el que decidiste dejar tu cuerpo terrenal, alejarte de todos nosotros para dirigirte quizás hacía un lugar lleno de paz, sosiego, tranquilidad, sin angustias, sufrimiento, y por qué no pensar, que buscando después de casi dos años de sufrimiento inmerecido, el consuelo y cobijo de los nuestros, nuestros padres. Ha sido un año duro, sin duda alguna, estamos librando una dura batalla a nivel mundial, lo que hace que nuestro pensamiento a diario, tengamos que administrarlo en todas esas malas noticias, a nivel de salud, trabajo, economía, etc. Pero eso no es motivo para que no te tengamos en nuewstro pensamiento diario.
Por eso decirte solo, que seguimos aún después de tu partida sintiéndonos muy orgullosos de ti, que llevamos un año sin ti, y uno menos para volver a encontrarnos. Te queremos.
Descansa en la Paz del Señor.