A mi querido y gran abuelo

Llueve por la agonía de que no te tengo y cada gota representa un beso los que me dabas en ese momento lo tengo ahora pero de recuerdo y llueve tanto por mi gran lamento y acompañado horas de sufrimiento, tu recuerdo está en mi alma y te llevo dentro. Ahora estás en otro lugar descansando en paz pero sabes bien que no te voy a olvidar, voy a conservar tu amor hasta el final. Antonio Arenas Rodríguez falleció en Bayárcal. Los que lo queremos tenemos un gran vacío en nuestro corazón y es que se fue una de las mejores personas que existe. Tenía sus más y sus menos como todo el mundo pero aun así era muy especial para mí, todavía lo recuerdo como si hubiera sido ayer, cuando estaba sentado en el lado izquierdo del sofá, contemplando por la ventana el paisaje. Esa noche cuando él falleció, yo me encontraba durmiendo tranquilamente cuando de repente el teléfono sonó, no me lo podía creer mi abuelo al cual yo quería ya no estaba conmigo, nos había abandonado. No pude ir a su entierro ya que era demasiado pequeña. Se me desembocan los sentimiento al pensar en ti, en tus hijos, nietos y bisnietos que no has podido conocer y ellos no han podido disfrutar de su abuelo. Saluda a la abuela y también saludos para el primo Óscar que al igual que tu no he podido disfrutar con el muchas cosas. Te quiero, abuelo.