Estoy segura que te sorprendería si no te escribiera algo, dirías : las cosas de Taté. Desde que tengo uso de razón has estado presente en mi vida, en los buenos y en los peores momentos. Tú vida ha sido un crecimiento constante que también se refleja en la forma de llamarte, de Loli has pasado a Lola. Tu sonrisa, escucha, comprensión, ternura, siempre irán conmigo. Me conocías bastante bien y me trataste siempre como una hermana, como la hermanilla que siempre he sido para mi hermano, a pesar de tener tú otra. Estos momentos tristes por no tener tu presencia son un constante agradecimiento en mi vida. Un agradecer haberte conocido, compartir tantos momentos, tu cariño, no sólo para mí sino también hacia mi marido y hacia los niños. Don especial con los niños Los niños para los que tenías un “don especial”, los atraías, eras un imán. Siempre tenías la chuche apropiada y cómo no el detalle de un viaje, de un santo, cumpleaños ... Loli o Lola, como ahora te llaman, siempre tan detallista en todo, no se te escapaba nada por mal que lo estuvieras pasando. Tengo que decirte que me perdones si en este tiempo atrás no he sabido, por unas u otras cosas estar más a tu lado, pero hay veces que uno se paraliza y no sabe vencer los obstáculos que encuentra. Tiempos duros y bastantes difíciles para todos, incluso para los niños, tus niños, como los llamabas. Poco a poco se fueron dando cuenta de la gravedad de tu enfermedad y han sido muchos, muchos los detalles que han tenido. ¿Te acuerdas el día de tu cumpleaños? Sí, cuando te hicieron un regalo con su propio dinero. Ese regalo como bien sabes era algo mucho más, sabían que las cosas no iban lo bien que debieran y querían que te llevaras el mayor de los regalos que te podían hacer: su amor. Esa tía, su tía Loli, de la que se les llenaba la boca. Esa tía que se convirtió en madrina de las niñas y que siempre tenía un lugar para el niño. Nunca podré agradecerte tantas y tantas cosas, tantos y tantos gestos, con mis padres, en Navidad ... Navidad que sin tí hace años se habría terminado en la casa, después de morir papá y que ahora nos dejas la misión a otros para que no termine; como bien decías: hay niños y tiene que continuar. Llega esa época del año que tanto te gustaba, en la que tú casa se convertía en luz, color, ... olor a Navidad. Difícil tarea Época de mesa abierta a todos, casa dispuesta a recibir a una familia bastante numerosa, haciendo el papel de hija para que mamá no sufriera, de regalos para todos y de esa "chispa" que de pronto tenías inventando cualquier cosa con tal de arrancar una sonrisa para aparcar las penas. Difícil tarea nos dejas, pero seguro, aunque con mucho esfuerzo, conseguiremos celebrar la Navidad, Tú Navidad, porque durante este tiempo atrás has sido la fuerza y la unión de muchos. Persona especial que tenía que irse un día especial, el 1 de Noviembre, día de todos los santos. Un día que no se nos puede olvidar jamás, en el que pudiste recuperar la sonrisa y la paz que durante el último tiempo se llenó de sufrimiento y dolor.A tú lado me hacías sentir “la mejor” y ahora que estás conmigo, sé que me ayudarás a conseguirlo. No te preocupes y ten siempre presente que estaré para todos y en ese todos está también tu familia, tú padre y hermanos, que es también mía.