Los que tenemos la fortuna de iniciar hoy las vacaciones nos encontramos una mala noticia. A las once de esta mañana despediremos en Sorbas a la hasta ahora presidenta de la Asociación de Emigrantes Retornados en Almería, Juana Mari Sánchez, nacida en Sorbas en 1956. Dice Alejandro González Iñárritu, el director de ‘Biutiful’, que España estuvo conquistada por los inmigrantes y ese es un viaje doble de ida y vuelta. Como el que acaba de hacer Juana Mari, madre de una estudiante en Murcia y de Ángeles, una de las primeras en realizar un máster de periodismo deportivo, que emula a su madre al ser una de las pioneras en atreverse a narrar un partido de fútbol para la radio.
La asociación de Almería Asaler fue constituida en 1999 por un grupo de emigrantes retornados almerienses, encabezados por Juana Mari Sánchez, que evidenciaron la falta de una organización que representara y defendiera los intereses y los derechos adquiridos de los almerienses que volvían a su tierra tras sus periodos de emigración. Estas asociaciones ya existían en otras provincias y los numerosos retornados de la nuestra se veían obligados a largos desplazamientos a la hora de dar respuesta a sus demandas de atención integral, tanto para los trámites de inicio de una nueva etapa de sus vidas como de recibir sus pensiones y demás prestaciones a los que tienen legítimamente derecho por sus trabajos en el exterior.
Asaler trabaja por cada rincón y cada pueblo de Almería, provincia que ha tenido un importante flujo migratorio. “Sorbas está a la cabeza”, nos dijo hace unos meses Juana María Sánchez, “ya que los fundadores de Asaler somos sorbeños y es sin duda el pueblo del que más acuden a nosotros, pero debemos destacar que determinadas zonas como Filabres, Alhamilla y el Levante tienen pueblos donde el 80 por ciento de la población masculina de los años 60, 70 y hasta 80 emigraron”. “Cuando una persona de un pueblo acude a nosotros y es atendido, notamos un acentuado incremento de retornados de ese pueblo”, dijo como uno de sus últimos testimonios. Almería capital es uno de los puntos donde más personas jóvenes regresan. “La falta de oportunidades convierte este retorno en una nueva emigración y está acrecentando la marginalidad en un colectivo tan digno como éste”, afirmó.
En la película ‘Un franco, trece pesetas’ se recoge la crónica de los emigrantes españoles. Ahora se produce el fenómeno del retorno, pero hay una población inmigrante creciente que se adapta a la realidad. Los tiempos han cambiado de manera acelerada y ahora las mejores generaciones de jóvenes almerienses se buscan la vida en el extranjero. Otra de las últimas aportaciones de Juana Mari fue que Asaler llevara a cabo una campaña de sensibilización sobre el nuevo perfil de emigrante retornado como fuente de diversidad.