Paco, hoy día 4 de octubre de 2013 hace dos años que decidiste dejarme. Te fuiste sin el mínimo ruido, y en el día de la Virgen del Rosario, y también en el de la Virgen del Carmen, tan querida y venerada por nuestros padres, y por ti que la adorabas.
Mi querido esposo, fuiste tan humilde hasta para morir, y te marchaste tranquilo y sin hacer ruido; sin el mínimo síntoma de dolor, para quedarte en un dulce sueño.
Sin ti ya no es igual, ¿y sabes por qué? Tú siempre estuviste ahí, conmigo, para lo bueno, y para lo malo. Con los tuyos fuiste un referente, siempre orgulloso de tus hermanos y familia.
Sólo decirte que aunque pasen los años nunca te borraré de mi vida, ni de mis pensamientos. Dos años sin ti, un tiempo relativamente corto en el calendario, pero eterno en mi corazón.
Como creyente y cristiano que eras, descansa en paz. Tu mujer que no te olvida, y te seguirá recordando mientras viva.
Francisco Milán Madrid se casó con María Cabrerizo Cruz, con la que convivió parte de su vida. Cada vez quedan menos testimonios como los que tú ofrecías, cuyos ojos han visto acontecer las miserias de una Guerra Civil y el sufrimiento de tu tío Diego Ventaja, nacido en Ohanes y obispo de Almería. Actuaste toda tu vida como un santo, por eso llevabas la sangre de un mártir. ¡Dios bendiga tu alma!