Ingredientes
- 1 kg de almejas
- 2 cebollas
- 1 limón
- 3 dientes de ajo
- 125 ml de aceite de oliva
- 200 ml de vino blanco
- Ramillete de finas hierbas
- 2 hojas de laurel
- 2 cucharadas de harina
- 1 clavo
- Nuez noscada
- Pimienta molida
- Sal
Preparación
Lavar las almejas en agua templada y dejarlas en remojo 15 minutos, para que suelten la arena. Mientras pelar y picar las cebollas que sean grandes y los dientes de ajo. Exprimir el zumo de limón.
Freír la cebolla y cuando esté blanda, sazonar con la sal, la pimienta el clavo de especies, la nuez moscada y los ajos picados. Espolvorear con un poco de harina, cocer y remover hasta que la harina esté medio tostada.
Pasar todo a una cazuela a fuego normal, verter el vaso y medio de agua y dejar cocer unos 10 minutos hasta formar una papilla, remover para que no se pegue. Cuando haya dado un hervor, agregar el vino blanco, una cucharada y media de zumo de limón, las dos hojas de laurel y las finas hierbas. Cuando vuelva a hervir, agregar las almejas e introducir la cazuela en el horno, previamente precalentado y cocer aproximadamente unos 45 minutos a temperatura moderada.
Para servir espolvorearle por encima una ramita de perejil muy picadito, y en los lados unos gajitos de limón.
Un plato marinero y muy almeriense, que podemos poner de aperitivo o entrante. Maridar con un vino blanco de nuestra tierra, que esté fresquito a su temperatura ideal.