Ingredientes
- 1 l de nata
- Azúcar glass
- 20 g de mantequilla
Para las natillas
- 500 ml de leche
- 75 g de azúcar
- 1 rama de canela
- 6 yemas de huevos
- 1 hoja de gelatina
Preparación
Para las natillas, batimos en un bol un chorrito de leche con las yemas. Ponemos al fuego en una cazuela el resto de leche, el azúcar y una rama de canela. Cuando la leche esté caliente, se añade un poco a las yemas, mezclamos bien y se vuelca todo a la cazuela. Cocinamos brevemente sin que hierva. Agregamos una hoja de gelatina, remojada en agua y removemos bien. Colamos la mezcla y la dejamos enfriar. Montamos la nata con una cucharada de azúcar glass y mezclamos suavemente con las natillas. Untamos con mantequilla un molde de corona y lo enfriamos en el frigorífico. Echamos la mezcla en el molde e introducimos en el congelador durante 2 horas. Para la decoración, utilizaremos tres melocotones en almíbar y medio vaso de caramelo líquido. Trituramos los melocotones hasta conseguir un puré. La elaboración de las natillas es bien sencilla. Sólo hay que tener bastante cuidado de que la mezcla que hemos obtenido no hierva, ya que, de lo contrario, se cortaría. Otro consejo importante es que la leche y huevos empleados deberán ser muy frescos. Una vez que sacamos el molde del congelador y lo emplatamos decoramos, a gusto de cada cual, o como aparece en la fotografía, con el puré obtenido de triturar los melocotones y una hojita de hierbabuena en el centro.
