En lo que va de año son una veintena las personas que, enfermas de cáncer, se han beneficiado del banco de pelucas que gestiona en Almería la Asociación Española contra el Cáncer (AECC). La gerente de la entidad, Loli López, explica cómo las pelucas que se prestan son cedidas por personas que ya no las necesitan para que otros enfermos que no pueden hacer frente a la compra de una de ellas pueda utilizarla durante el tiempo que dura el tratamiento.
Las pelucas donadas se llevan a limpiar y una peluquera las prepara para que estén a disposición de quienes las puedan necesitar. Además, la AECC mantiene un convenio, a nivel nacional, con Svenson de modo que para toda España facilitar un centenar de pelucas para mujeres enfermas de cáncer con pocos recursos económicos.
Desde Almería se busca la posibilidad de acceder a estas pelucas siempre y cuando no haya ninguna disponible en el banco. En la sede hay pelucas de modo que si la necesidad es inmediata y hay alguna que puede servir, la disponibilidad es más rápida que si hay que recurrir al convenio de Svenson, reconoce López.
Y es que estas segundas son a medida y la paciente que las vaya a necesitar tiene que desplazarse para que la peluca sea la que más se ajuste a ella.
En cualquier caso, el personal de la Asociación Española contra el Cáncer en Almería trata siempre de dar una solución a las pacientes oncológicas.Esta entidad recoge en Almería entre diez y quince donaciones de pelo semanales destinadas a pelucas para las pacientes oncológicas que lo necesiten.
Donaciones de pelo
Las donaciones de pelo se entregan a la Asociación Española de Posticería, una empresa que, gracias a un convenio firmado con la AECC, elabora las pelucas para las pacientes sin coste alguno, explican desde la asociación.
La campaña de donación se puso en marcha en noviembre pasado y los donantes han de cumplir algunas características concretas para que el pelo sirva para este fin solidario. “Conviene entregarlo trenzado o en coleta, y sujeto por gomas en los dos extremos”, explica López. La gerente de la AECC en Almería insiste en que la donación de pelo ha de tener una longitud mínima de 30 centímetros para que pueda ser utilizado a la hora de preparar una peluca.
“No sirve el pelo a capas, pero sí el que está teñido”. Y lo importante es que sean cada vez más las mujeres (también pueden ser hombres) que donen pelo para que puedan hacerse más pelucas, apuntan los impulsores de la iniciativa. Estas pelucas van destinadas a aquellas pacientes oncológicas que pierden su pelo a consecuencia de los tratamientos con quimioterapia. Las pelucas, que se entregan de forma gratuita, son después reutilizadas por otras pacientes, explican desde la AECC.
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