Alemán y su mujer multiplicaron por 12 su patrimonio

El ex interventor imputó lujosos gastos privados como gastos de empresa para no pagar a Hacienda

José Alemán, ex interventor municipal de El Ejido
José Alemán, ex interventor municipal de El Ejido
La Voz
01:00 • 11 jul. 2017

La sociedad mercantil del ex interventor municipal José Alemán, Sistemas de Dirección, usada como instrumento para el cobro de comisiones ilegales según la señala la investigación judicial del caso Poniente, también sacaba provecho fiscal deduciendo como gastos algunos conceptos que, lejos de ser de explotación, correspondían a cuestiones privadas del propio interventor y su familia.
Así, figuran gastos como compra de mobiliario y decoración, facturas de teléfonos móviles, viajes, compra de coches, vuelos, entradas para los toros, y hasta compra de caviar y la boda de Alemán y su esposa en el Hotel Ritz de Madrid. A lo que se añadiría, en cantidades muy significativas, la compra de inmuebles y alquiler.
El informe de la Abogacía del Estado destaca como muy relevantes los pagos que Alemán hacía a su esposa, Isabel Carrasco, en concepto de alquiler de inmuebles a nombre de esta. Un mecanismo que el Ministerio público considera “una simulación más, que se utiliza para transferir fondos a su esposa de procedencia ilícita que esta ha utilizado, principalmente, para compra de inmuebles”.




Ocho inmuebles
Tanto, que, de acuerdo con los datos que obran en el sumario del Caso Poniente, Isabel Carrasco pasó en apenas siete años de tener un patrimonio en torno a los 50.000 euros a uno que superaba los 600.000 euros, fundamentalmente en concepto de inmuebles. Esas cifras suponen un incremento de prácticamente doce veces el valor de las posesiones de la mujer de interventor. Isabel Carrasco pasó así de ser propietario de solamente un inmueble a ser propietaria de ocho.
Para el letrado que representa los intereses de la Hacienda pública en este procedimiento, la conclusión -similar al de otras acusaciones personadas en la causa- es que la actividad de Sistemas de Dirección consistió fundamentalmente en “el cobro de comisiones ilegales satisfechadas por los beneficiarios de contratos municipales”. Por ello, considera que Alemán debe pagar IRPF que no abonó al utilizar el mecanismo de gastos de empresa.










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