El 63% de la población cobra por debajo de un sueldo mileurista

El buen comportamiento de los datos macroeconómicos -en 2017, Almería registró un crecimiento del 3,2%- se da de bruces con la realidad de la calle, aquella que viven decenas de miles de ciudadanos cada día. Un informe elaborado por CC.OO sobre las rentas salariales muestra de forma descarnada cuál es la situación de los trabajadores por cuenta ajena en la provincia y lo que refleja es tan desolador que no invita ni al optimismo ni a los golpes de pecho con los que apuntalan los políticos sus discursos de recuperación económica. 

El estudio se ha realizado con la información que aportan las estadísticas sobre Mercado de Trabajo y Pensiones que publica la Agencia Tributaria. Es decir, no hay trampa ni cartón,  porque lo que se muestra son los datos declarados por empresarios y trabajadores en la última Declaración de la Renta, la del ejercicio 2016, comparándolos con los de los nueve años anteriores. Lo que se observa, además de la pérdida de 36.000 puestos de trabajo desde que comenzó la crisis y de que aún faltan por recuperar 10.000 empleos para situarse en cifras de 2007, es el empobrecimiento paulatino de los trabajadores, con salarios tan bajos que un 63% de ellos no es ni siquiera mileurista. 

“Salarios de miseria”

En la actualidad, la población asalariada en la provincia se sitúa en 288.514 personas. De ellas, 78.912 cobran un sueldo que no alcanza ni la mitad del salario mínimo interprofesional; esto es, sus ingresos se sitúan en torno a los 327 euros mensuales. Otras 57.040 personas perciben hasta 655 euros al mes y 49.987 trabajadores más reciben unos emolumentos que pueden llegar (lo que no significa que en todos los casos sea así) a los 972 euros mensuales. 

¿Qué significan estas cifras? Ni más ni menos, señala Antonio Valdivieso, secretario provincial de CC.OO, que 182.939 personas, el 63% de los trabajadores por cuenta ajena dados de alta en Almería, cobran “salarios de miseria”. Las cifras también sitúan a esta provincia la cuarta por la cola a nivel nacional con los sueldos más bajos. Solo están peor en Badajoz, Huelva y Jaén. 

“Los datos son demoledores. Dos de cada tres almerienses están por debajo de los 1.000 euros y la mitad no llega ni siquiera al salario mínimo. Es una situación tan dramática que urge que se tomen medidas inmediatas”, explica el líder sindical, que añade un par de aspectos que completan el opaco puzle que esconden los datos macro: el aumento imparable en los últimos años de la contratación en fraude de ley (más del 26% de los contratos revisados por la Inspección de Trabajo son fraudulentos) y los elevadísimos datos de contratación temporal, que en Almería superan el 94%.  

Las mujeres perciben 2.000 euros al año menos que los hombres 

Las mujeres sufren, al igual que sus compañeros varones, la precariedad y la desigualdad que se ha instalado en el mercado de trabajo en esta época post-crisis. Padecen, como ellos, la devaluación salarial y peores condiciones laborales y son, igualmente, víctimas de la contratación temporal, que supera en Almería el 94%, con uno de cada cuatro contratos que se firman con una duración de menos de una semana. Pero, además, cobran menos -hasta 2.000 euros al año de media- por el simple hecho de haber nacido mujeres. 

El informe realizado por CC.OO detalla que el salario medio de las mujeres en Almería se situó en 2016 en 12.517 euros, mientras que para los hombres fue de 14.568€. Una brecha salarial del 14% que es, con todo, muy inferior a la que se registra en el resto de Andalucía, que asciende al 23 por ciento. 

Brecha salarial

Por sectores productivos, las diferencias entre lo que cobran hombres y mujeres se sitúan en el 33% en la industria, el 32 por ciento en el manipulado, el 30% en las entidades financieras y compañías aseguradoras, el 27% en el sector de la información y la comunicación, el 25% en la hostelería, el 17% en educación o sanidad y el 11 por ciento en la agricultura. La distancia de género apenas se percibe en la construcción por el simple hecho de que el número de mujeres que trabajan en este sector es mínimo y residual.

Respecto a los salarios, la brecha más acusada se da en las entidades financieras, con diferencias de sueldo que llegan a los 10.000 euros anuales entre hombres y mujeres. 

“Las diferencias se han agravado y la acción en materia de conciliación es muy limitada y no responde a la necesidad de abrir el debate sobre una igualdad real y efectiva.

Además, la infravaloración de las tareas y ocupaciones ‘feminizadas’ ahondan en la desprotección y en la discriminación, especialmente en el empleo doméstico”, denuncia el secretario provincial de CC.OO. 

El panorama perfila una situación que, aunque ha mejorado en los últimos tres años, sigue adoleciendo de buena salud. El desempleo se sitúa por encima del 24% y el paro de larga duración afecta a la mitad de las personas que no tienen trabajo; de ellas, el 60% no recibe ninguna prestación. En 2017, además, solo se concedieron 2.325 ayudas mínimas de solidaridad. 

Por otra parte, el salario medio anual en Almería es de 13.600€, 5.200 menos que a nivel nacional, ha aumentado la siniestralidad laboral y Almería es la tercera provincia por la cola con las pensiones más bajas del país, con 743 euros de media. Los jubilados aquí cobran de media 180 euros menos que en el resto de España.