“El proceso de exámenes para acceder a la Universidad no admite trampas”

El primero de los tres días que tienen los estudiantes para realizar la Prueba de Evaluación de Acceso a la Universidad -PevAU- se ha desarrollado sin incidentes a pesar del notable incremento de alumnos respecto del año pasado, casi 400 más que en 2017. En total, 3.110 jóvenes han realizado los primeros exámenes y mañana se enfrentarán al resto de materias.

Los exámenes, como es habitual, se están desarrollando en la Universidad de Almería como en las distintas sedes en los IES Aguadulce, de Roquetas de Mar, Fuente Nueva, de El Ejido, Cura Valera, de Huércal Overa, Cardenal Cisneros, de Albox, y Abdera, de Adra. Las primeras horas, señala Manuel Gámez, director del Secretariado de Acceso y Relaciones con Enseñanzas Medias, “son las de más nervios, pero una vez pasado el arranque, cuando los alumnos ya ven los exámenes, esos nervios se van a menos, ya que comprueban que realmente el trabajo lo han hecho en los centros y vienen perfectamente preparados”.

Este curso, casi 200 estudiantes se presentan para subir nota en la fase de Admisión, al no haber llegado en 2017 a la puntuación que necesitaban para conseguir plaza en la carrera que desean cursar, y 75 proceden de Ciclos Formativos Superiores. El resto son de Bachillerato, y el reparto se ha efectuado por proximidad geográfica en las sedes antes citadas.

“La dinámica es la de siempre, la maquinaria está en marcha y solo ha habido alguna pegatina que no coincide, algún estudiante que ha venido sin el DNI, los estados de nervios y lo habitual, pero siempre la máxima de que la UAL lo que trata es de quitarles toda esa tensión a los chavales, todo se corrige, todo se soluciona buscando lo más fácil para el alumno”, apunta Gámez.

Tras tres días de pruebas, 12, 13 y 14 de junio, y tras los preceptivos para corregir los exámenes, el 21 saldrán las notas y ya empezarán a pensar en sus procesos de preinscripción de sus estudios. Superado el día de máxima afluencia, el más complicado porque se hace la parte común y, por tanto, coinciden todos los alumnos matriculados, mañana y pasado serán algo más relajados, ya que se reparten en las asignaturas de modalidad y específicas, y no todos los alumnos van los dos días.

Atrás habrán quedado las pruebas de Lengua, Idioma e Historia de España, en una maquinaria muy perfeccionada ya que los exámenes hasta que se reparten están muy bien protegidos para evitar que haya filtraciones como ha ocurrido en Extremadura.

“El proceso no admite trampa. Hasta que no pasa media hora, no sale ningún examen, y antes se custodian de manera que no se pueda acceder a través de redes; me atrevo a decir que, tal y como está montado el sistema, es imposible que haya algún problema”, afirma el director del Secretariado de Acceso de la UAL, que alaba también la labor del profesorado de Secundaria: “Sin ellos esta prueba sería imposible, durante todo el curso colaboramos para que el escalón entre Secundaria y Universidad sea cada vez menor”.