El Juzgado de Instrucción número Siete de Murcia ha abierto diligencias para investigar una presunta trama de pelea de perros con ramificaciones en la provincia de Almería. El órgano indaga sobre la presencia de criadores y competidores en Almería, Málaga, Madrid, Alicante y Tenerife. Los sospechosos integrarían una liga nacional clandestina para enfrentar perros en reñideros distribuidos por toda la geografía del país.
La investigación estudia posibles delitos de maltrato animal, contra la salud pública y blanqueo de capitales, según las diligencias del juzgado murciano.
Las peleas de perros generan grandes cantidades de dinero a través de las apuestas. De hecho, la Unidad de Delitos Económicos y Financieros (UDEF) emitió un informe sobre el presunto blanqueo de capitales sobre la finca adquirida por uno de los sospechosos en el año 2011. La investigación comenzó en 2016 en Madrid, aunque el juez Pablo Llarena otorgó las competencias a Murcia en un auto dictado este mes de junio.
Los agentes captaron abundantes conversaciones telefónicas y hallaron animales en mal estado, medicinas y aparatos o lugares de entrenamiento en la práctica totalidad de las entradas y registros acordados. La autoridad judicial habla del “penoso estado de los animales intervenidos”. En la provincia de Almería, la Policía Nacional y la Guardia Civil han realizado diversas operaciones anteriores contra las peleas de perros y de gallos realizadas en locales clandestinos.
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