La extraña normativa futbolística y una sociedad que aún no estaba preparada la alejaron en su juventud del deporte que amaba. Se dedicó al balonmano hasta que pudo volver a calzarse unas botas para triunfar en el balompié y capitanear, ahora, el proyecto del equipo femenino de la Unión Deportiva Almería.
Toda una vida de fútbol en sus piernas la han convertido en uno de los referentes, por experiencia y calidad, del equipo femenino de la Unión Deportiva Almería. Cristina Redondo (Carboneras, 1989) vive, entrena, trabaja y juega convencida de que su gran pasión llegará al gran público si se invierte lo suficiente, con cabeza, conocimiento y conciencia, tal y como parece que empiezan a hacer los clubes referentes del fútbol profesional en España.
¿Vivimos el gran momento del fútbol femenino hasta la fecha?
Los medios de comunicación están dando ahora mucho más espacio, al menos. Hace tres o cuatro años era impensable que se televisara un partido. Yo he tenido la oportunidad de ir a clubes importantes, como el Recreativo, pero las condiciones eran espantosas. No pude dar el paso de irme a Huelva porque no había apoyo económico. Incluso jugando en Primera División, el salario no daba para vivir, eran apenas 500 euros que requerían de una dedicación casi exclusiva y que no estaba compensada.
Hace poco vimos como acudían a Anoeta más de 20.000 personas para presenciar el derbi vasco femenino. ¿Se puede volver algo habitual a corto o medio plazo?
Yo creo que a largo plazo sí, a medio no lo veo. En esto hay que ir dando pasitos muy pequeños. Pero, sobre todo, hace falta apoyo económico y que la gente apueste por el femenino. Al final, el fútbol es un negocio y si no hay dinero, no te van a dar visibilidad. La pena es que aún hay mucha gente que no se cree que podamos atraer a tanta gente y dicen que “habrán regalado las entradas”.
¿Has vivido machismo en el fútbol?
Lo he vivido, pero no creas que mucho. No sé si es por la gente que me ha rodeado, que me ha dado siempre mucho apoyo, pero creo que no me he topado nunca con un machista en el ambiente del fútbol. Quizás fuera sí escuchas otras cosas, se oyen comentarios como “marimacho”, por jugar. Pero nunca algo así desde la grada, en el vestuario o en casa. No sé si es que tengo mucha suerte.
¿Se puede soñar con ser profesional en España?
Yo creo que sí. Tenemos equipos que son referentes, aunque sean pocos. Pero hay clubes con estructuras muy grandes, como el Barcelona, Atlético de Madrid o Athletic Club, que invierten mucho dinero en esto y donde sí puedes sustentarte siendo profesional y vivir del fútbol femenino.
Y, aunque no hayas vivido de primera mano esos prejuicios, ¿hubo muchas piedras en el camino?
Las notas a la hora de intentar desarrollarte como futbolista. Llega un momento en el que no puedes porque no te compensa el sacrificio que tú haces para lo poco que te da el fútbol ni tampoco por las pocas facilidades que hay. En otros sentidos yo siempre he sentido apoyo.
¿La afición almeriense os apoya?
Tenemos un foro no muy grande pero fiel que viene a vernos en los partidos más interesantes. Tenemos la suerte de que ahora nos van las cosas bien. Hay mucha gente que cuando me ve con el chándal me pide una entrada para el masculino y siempre les respondo que primero vengan a vernos a nosotras.
¿Tiene grandes aspiraciones este proyecto?
Se formó para tenerlas. Es como una selección de Almería. Las aspiraciones son seguir creciendo, jugar el playoff y poder ascender. Ahora, partido a partido, como dicen...
¿En qué debe mejorar para cumplir esas metas en el futuro?
La estructura de un club importante está, pero hace falta apoyo económico. Nos han puesto todos los medios para que podamos crecer pero, si el equipo asciende, esa inversión tendría que ir en consonancia.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/167792/quizas-he-tenido-mucha-suerte-pero-no-he-vivido-nunca-el-machismo-en-el-futbol