Un ganadero almeriense responde a la polémica de las gallinas ‘violadas’

Ha sido una de las historias que más minutos han acaparado en televisión y en las redes durante los últimas días: el colectivo Almas Veganas denunciaban lo que, en su opinión, es una "violación" de las gallinas.

Esto es, que estos animales sufren en granjas prácticas vejatorias, que son 'violadas' por los gallos y que se ven forzadas a poner más de 300 huevos cada año cuando podrían poner 20, algo que les supone un "desgaste emocional".

"Hay mucha tortura y asesinato en la industria del huevo", aseguraban Fanny y Pilar, del colectivo Almas Veganas, en un vídeo en el que tiraban huevos en señal de protesta. 

Las imágenes, tras hacerse virales en las redes sociales, multiplicaban su eco a través de programas como 'Todo es mentira' de Cuatro.

Ahora, un ganadero almeriense ha respondido a la polémica de las gallinas 'violadas' con otro vídeo que ha compartido en su perfil de Facebook. Él se llama Juan Carlos Sánchez y muestra cómo trabaja en su explotación avícola Km. 21, en la que trabaja junto a su madre.

Las imágenes, que Vox ha compartido en Twitter a la voz de "¡Viva el campo español y sus gentes!", también han llegado este miércoles a 'Espejo público' de Antena 3, donde el joven ha participado en directo en el programa, en el que también estaba Fanny, de Almas Veganas. "Los gallos violan a las 'gallines' [se refieren así a los animales], sufren y sienten un abuso no consentido". 

En su vídeo de Facebook, publicado el pasado domingo 1 de septiembre y que va camino de los 2,5 millones de reproducciones, Juan Carlos Sánchez recorre su granja grabándose con el móvil para explicar cómo es su trabajo y las condiciones en las que las gallinas se encuentran. 

"Aquí ninguna gallina sufre, ponen los huevos donde quieren, están cuidadas, tenemos el techo aislado del calor y tenemos un sistema de nubilización, como el de los bares, para que no tengan calor", ha expresado el almeriense en 'Espejo Público'.

Asimismo, en su vídeo asegura, por ejemplo, que las gallinas "ponen los huevos cada 28 horas" y que para ello no necesitan a los gallos. Y se dirige al colectivo Almas Veganas para decirles que si ellas pueden comer vegetales es porque el campo se abonado antes "con el excremento de los animales".

El almeriense ha visto ahora cómo su didáctica explicación se ha hecho más viral como la singular denuncia que lo ha originado.