Prisión sin fianza para los dos acusados de violar a una joven en Artés de Arcos

El Juzgado de Instrucción número Seis de Almería ha ordenado prisión provisional, comunicada y sin fianza para los dos jóvenes acusados de violar a una chica de 21 años en una vivienda del barrio de Oliveros, según confirman fuentes oficiales del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

C. de 28 años y J. de 27 años estaban identificados desde la misma mañana del lunes gracias a los datos ofrecidos por la víctima, primero a la Policía Local de Almería, y luego a los agentes de la Policía Nacional implicados en la investigación del suceso. La última hora de la tarde del miércoles se presentaron voluntariamente y acompañados de un abogado en la Comisaría Provincial de Almería para responder de la acusación de un presunto delito contra la libertad sexual.

C. y J. están imputados por forzar presuntamente a una joven de 21 años, cuya identidad se mantiene protegida, en el interior de un inmueble de la calle Artés de Arcos donde había accedido también junto a una pareja de amigos (chico y chica citados como testigos) la madrugada del domingo al lunes.

Como adelantó LA VOZ DE ALMERÍA, la joven salió del domicilio y se refugió dentro de un establecimiento cercano. La dependienta del comercio la encontró visiblemente nerviosa y alertó a las autoridades. Una patrulla de la Policía Local llegó hasta el establecimiento y pocos minutos después la Policía Nacional. En su relato la joven aseguró que había sido violada por dos conocidos. La joven ingresó en el Hospital Torrecárdenas la mañana del lunes y posteriormente prestó declaración ante los agentes de la Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer (UFAM) encargados de las diligencias.

Dos versiones
Sobre lo que sucedió en la vivienda existen dos versiones contradictorias. La denunciante asegura que C. y J. la forzaron esa madrugada en el piso de Artés de Arcos y que quedó paralizada mientras la agredían sexualmente, sin capacidad para defenderse una vez fue agarrada del cuello y empujada a la cama de la habitación.

El relato, cuyos detalles se obvian en esta crónica, precisa que no hubo consentimiento de la víctima, que lloró durante todo el tiempo, según las diligencias en manos de la magistrada instructora Almudena Nadal Siles.

Por su parte, aunque los acusados no prestaron declaración en sede policial, de las pesquisas se desprende que ambos niegan la autoría de cualquier agresión sexual y subrayan que las relaciones eran consentidas. De hecho, los agentes de la Policía Local de Almería que atendieron a la chica realizaron gestiones para la localización de los sospechosos y revelaron una conversación telefónica donde los jóvenes negaban cualquier violación o abuso.

La amiga de la víctima aseguró que no detectó indicios de violencia ni llanto las dos veces que entró en la habitación esa noche, aunque luego tuvo que consolar a la chica que empezó a mostrarse afectada. Mientras, el segundo testigo afirmó que escuchó las relaciones sin detectar nada que le hiciera pensar en una violación, aunque sí vio a la joven llorando junto a su novia posteriormente.

La Policía Nacional realizó gestiones para la localización de C. de 28 años y J. de 27 años  y, al mismo tiempo, para la recopilación del mayor número de pruebas y testimonios posibles sobre el caso. Tomó declaración a la principal testigo, a los agentes de la Policía Local de Almería y a la propia joven.

Autoridad judicial
La tarde del miércoles los presuntos agresores acudieron a la Comisaría Provincial por su propio pie. Durante la mañana del jueves fueron trasladados hasta la Ciudad de la Justicia para comparecer ante la magistrada instructora del caso.

A primera hora de la tarde del jueves se confirmó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza por un delito contra la libertad sexual, sin precisar qué tipo penal podría aplicarse (agresión o abuso).

Los delitos contra la libertad sexual crecieron un 25 por ciento entre enero y septiembre de 2019 en la provincia de Almería, según estadísticas oficiales publicadas por el Ministerio del Interior. En los primeros nueve meses se registraron más de 200 delitos sexuales, de los cuales 25 suponían presuntas agresiones con penetración.