Tensión entre los maestros almerienses e Imbroda: “Nos sentimos engañadas”

"Un gel, distancia de medio metro, porque las clases son pequeñas... Eso no. Yo me siento engañada, es mi humilde opinión. Porque los niños van a entrar al colegio y están las clases igual que estaban". Con estas palabras y una decisión propia de quien cree firmemente en lo que dice, una maestra del Colegio Blas Infante de Aguadulce se plantó este viernes delante del consejero de Educación de la Junta de Andalucía, Javier Imbroda, para dejarle claro el descontento reinante entre los docentes andaluces por la vuelta a las aulas que comenzó el pasado día 1 de septiembre con los menores de 0 a 3 años.

Imbroda, que acudió ayer al municipio de Roquetas de Mar para visitar el IES Sabinar, donde, ademas, un nutrido grupo de maestros se encontraba realizándose los test rápidos previos al regreso a clase y no perdieron la oportunidad de decirle cara a cara todo lo que sentían al máximo responsable de la Educación andaluza. "Hay que meter más profesores, dividir los turnos y que unos niños vayan por la tarde y otros por la mañana", espeta la maestra a un Imbroda sorprendido por sus declaraciones y que contesta con un "¿sí?" y una mirada a Gabriel Amat, alcalde de Roquetas de Mar, a la afirmación más tajante de la docente: "Yo me siento engañada".

Pero la conversación avanza y el consejero, a su pregunta de qué haría, recibe como respuesta un "plan" para que haya dos turnos de clase, "uno por la mañana y otro por la tarde", especifica la maestra, que continúa su conversación con Imbroda.

- "¿Y la conciliación, como concilian los padres y los profesores?

- "Ese es otro problema que está entre medias. Hay que dar algún tipo de ayuda para que puedan llevar a sus hijos en el turno de tarde. Hay ideas, lo que pasa es que no se quiere gastar nada", sentencia la maestra, que continúa con su descarga de razones por las que no confían en un óptimo regreso a clase.

Es entonces cuando entra en juego el alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat, quien, acompañado por Imbroda, le deja una enigmática sentencia a la maestra:  "Hay que tener fe e ilusión", dice Amat, a lo que la docente responde que fe e ilusión, "poca". "Estamos engañados totalmente. Hay incertidumbre", sentencia la maestra mientras se le unen otras voces de docentes que también aseguran sentirse "engañadas" por las decisiones de la Consejería de Educación. Por último, Imbroda descata el comienzo del curso escolar en las guarderías, donde ha comenzado "sin problemas".