La Legión llora la pérdida de Enrique Gomáriz, general jefe entre 1998 y 2001

La Brigada Rey Alfonso XIII de la Legión llora la pérdida de Enrique Gomáriz de Robles. El general falleció el pasado jueves tras sufrir un agravamiento de su estado de salud en las últimas semanas.

Enrique Gomáriz pertenece a un selecto grupo de generales honrados con el mando de la Legión tras su conversión en Brigada Rey Alfonso XIII a mediados de los años 90, coincidiendo con el traslado de las unidades a la base militar Álvarez de Sotomayor.

Gomáriz fue nombrado general de brigada el 16 de octubre de 1998 y asumió el liderazgo de la Legión el 6 de noviembre de ese año. Su antecesor fue el general Francisco Javier Zorzo Ferrer. En noviembre de 2001 entregó el testigo al general Rafael Dávila Álvarez.

Durante su jefatura la Legión consolidó su posición como punta de lanza de las Fuerzas Armadas españolas en el exterior, especialmente con los despliegues en Kósovo en tres ocasiones entre 1999 y 2001. Se contaba entonces con la experiencia en los Balcanes y España entraba en el siglo XXI con el objetivo de modernizar sus tropas para asumir los retos de nuevos conflictos amparados por la ONU y la OTAN.

Durante el periodo de mandato del general Gomáriz de Robles se realizaron algunos cambios en la base de Viator (Almería) como la creación e instalación del conocido monolito de homenaje a los caídos, que hoy preside el patio de armas Álvarez de Sotomayor.

El general es padre del coronel Enrique Gomáriz, que asumió el pasado 17 de diciembre el mando del Tercio Don Juan de Austria en un acto celebrado en Viator y presidido por el general Melchor Marín Elvira. El coronel dedicó palabras de cariño a su padre, ya enfermo, y lamentó que no pudiera asistir a una toma de posesión con especial carga simbólica.

El general Enrique Gomáriz de Robles mandó como coronel el Tercio Alejandro Farnesio IV de la Legión, que tiene su sede en el cuartel de Ronda (Málaga). Hoy se llora su pérdida también en la ciudad malagueña.