Así será el proyecto puerto-ciudad: el futuro litoral a través de un vídeo

Una imagen vale más que mil palabras. Y eso es lo que ha pensado la Autoridad Portuaria de Almería que hacía público en la jornada que ha organizado junto al RETE y la Fundación Bahía Almeriport el diseño que ha previsto para el corto, medio y largo plazo, porque será un proyecto por fases, para el desarrollo de la integración del puerto y la ciudad.

Explicaba el diseño y alguna que otra propuesta que aún está por madurar, el director de Planificación de la Autoridad Portuaria, Antonio Bayo, con un vídeo en el que se podía contemplar la Rambla conectada por el Muelle de Levante en altura, este dique duplicado en tamaño y con dos plantas, un paseo marítimo que parte desde esta zona hasta conectar con el actual, incluso con el paso por el Club de Mar abierto, y el Cable Francés rehabilitado y puesto en uso como zona de paseo, embarcadero y restauración. Toda una vuelta a un frente litoral que cambia por completo.

Arrancamos la visión de este proyecto en el Muelle de Levante, que además será de las primeras actuaciones en realizarse. Todo comenzará duplicando su tamaño y alcanzando 120 metros de longitud y ocho de calado. Esto le permitirá contar con un nuevo dique que se destinará a la llegada de cruceros que estará separada a través de una valla transparente del resto de los espacios que estará cerrada mientras hay barco y pasajeros en la zona, y que será zona de paseo el resto del tiempo.

Sobre el muelle se diseñan, aunque llegarán más adelante, las zonas de ocio, restauración u oficinas. Y es que la intención que se ha mantenido para este espacio es la de la creación de "espacios multifuncionales" que puedan dar respuesta a diferentes necesidades que surjan.

Pero además de estos espacios, el Muelle de Levante tendrá otro uso, el de aparcamiento pero no estará al mismo nivel, sino que quedará escondido bajo toda la zona comercial.

Dentro también de las actuaciones que se harán en el corto plazo, decía la concejal de Urbanismo, Ana Martínez Labella, que las ejecutará ya la próxima Corporación porque hay que firmar los convenios, terminar la tramitación urbanística, lograr la financiación y licitar (en un año tiempo no da), es la ampliación de la pasarela que a día de hoy conecta el Muelle de Levante con la zona de Las Almadrabillas. 

Conexión

Esta pasarela quedará del mismo tamaño que el paseo marítimo dando continuidad al mismo hasta llegar al entorno del Cable Inglés que ya estaría rehabilitado. Si pensamos en el proyecto a largo plazo, tendría lista la tercera fase para la que se busca financiación y que contempla en este Bien de Interés Cultural no solo el paseo peatonal sino salas de exposiciones o restauración. De hecho, se contempla alguna instalación “tipo Catamarán” en este espacio y zonas lúdicas pero “siempre respetando el monumento”.

En Las Almadrabillas se contempla adecentar todo ese espacio eliminando la valla que separa al Cargadero del mar y respetando el monumento a las víctimas de Mathausen. A partir de ahí hay que hablar en dos tiempos diferentes. De momento el Club de Mar seguirá contando con su concesión administrativa pero cuando esta termine, será el momento, según explicaba Antonio Bayo, de abrir el puerto deportivo y que el paseo marítimo también transcurra a lo largo de esta instalación.

Cable Francés

Hasta aquí llega lo que ya está establecido como la futura realidad del proyecto puerto-ciudad pero desde la Autoridad Portuaria se ha trabajado también en otras propuestas que seguir integrando ambos entornos. Así, el hecho de que la Rambla de Almería cuente con un importante desnivel necesita de una solución que lo nivele con el Muelle de Levante. Varias son las opciones posibles, la que propone el equipo del Puerto de Almería pasa por tratar de aprovecharlo para establecer dos niveles: uno en altura que estableciera la conexión desde la Plaza de las Velas hasta la nueva zona del Muelle de Levante, y un segundo, el de la circulación de vehículos que seguiría donde está pero pasando bajo esa nueva infraestructura de paso. Una vez solucionada esta conexión siguieron tratando de resolver el nudo creando una importante plaza con dos rampas que conectaran con el Parque Nicolás Salmerón.

Esto está por ver si es la solución definitiva, al igual que también si se estima una novedosa y costosa iniciativa para el Cable Francés presentada por parte de un estudio de arquitectura. Según este proyecto, se rehabilitaría el Cable y se reforzarían sus pilares para establecer una instalación en dos alturas: en la parte alta se crearía una zona de paseo y mirador y en la parte baja se combinaría un espacio para sacar a concesión un establecimiento de hostelería para culminar en un embarcadero que permita llegar hasta este espacio por vía marítima. 

Pasos en firme

Sea como sea, lo cierto es que con este diseño y las propuestas planteadas lo que queda claro es que ya hay pasos en firme para que esta vez el desarrollo del proyecto puerto-ciudad sea una realidad. Así lo afirmaba en varias ocasiones el presidente de la Autoridad Portuaria, Jesús Caicedo, quien tiene claro que la cesión de los suelos al Ayuntamiento es un paso que no tiene vuelta atrás.

Durante el acto de inauguración de esta jornada, la presidenta de RETE, Teófila Martínez, destacaba que “las ciudades portuarias multiplican su potencial y capacidad de generación de riqueza cuando trabajan en objetivos comunes y actúan de manera integrada: puerto y ciudad”. En este sentido, la presidenta de esta asociación señala el papel que deben asumir las autoridades portuarias “para cambiar el modo en que la sociedad percibe este tipo de industria, porque, históricamente, ninguna ciudad costera de relevancia mundial se entiende sin la presencia de un puerto y su conexión, a través de éste, con un sistema marítimo y logístico que la conecte con el mundo”, indicó Martínez. “La integración no debe ser solo física, sino cultural y social, en procesos en los que no debe haber perdedores y vencedores, sino que deben ganar todos”, expresó.

El alcalde de Almería, Ramón Fernández-Pacheco Monterreal, defendió el proyecto puerto-ciudad como “el mayor escenario natural para la creación de empleo y riqueza de Almería en el Siglo XXI”. Fernández-Pacheco insistió en la necesidad de ver “un proyecto de ciudad, estratégico e histórico y no un proyecto político”, reclamando en ese objetivo el máximo consenso para abordar su desarrollo, abogando por una planificación a medio y largo plazo que permita a la ciudad “un salto de calidad pensando en la próxima generación de almerienses, con los que estamos comprometidos a dejar una mejor ciudad que la que nos encontramos”.

Aprender de Málaga
Dentro de la jornada también hubo tiempo para aprender del trabajo que se está realizando en Málaga de la mano del presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, y de hablar de otras experiencias nacionales que contaba José Luis Estrada, el ingeniero de Caminos, Canales y Puertos y director de Portus; o de experiencias internacionales de la mano del presidente de la Fundación Bahía Almeriport, Diego Martínez Cano, quien además aprovechaba para reclamar la llegada directa desde la A7 hasta el Puerto, una intervención vital para el crecimiento del Puerto de Almería.