Piden cárcel a unos padres por “violencia físical y mental” a su hija

La Fiscalía de Almería solicita penas de tres y dos años de prisión para un matrimonio acusado de someter a una de sus hijas a un "clima de violencia" física y psíquica en el que era "frecuente" la agresión, la "humillación" y el "insulto", lo que llevó a la menor a "padecer un cuadro de ansiedad y autolesiones" por las que tuvo que ser ingresada en una unidad hospitalaria de Salud Mental.

El Ministerio Público remarca que, tras ser dada de alta, los "episodios de amenazas y de presión psicológica" por parte de la madre "se intensificaron" y describe, al margen de agresiones físicas, comportamientos para "aislarla" de su entorno y continuos "menosprecios", llegando a decirle que "si quería matarse, que lo hiciera".

El escrito de calificación provisional, consultado por Europa Press, atribuye a ambos la supuesta comisión de sendos delitos de violencia doméstica habitual e interesa para el padre la pena de tres años de prisión al aplicar al agravante de reincidencia al estar condenado por maltrato habitual, y una condena de dos años de cárcel para la progenitora.

Clima de violencia

Según relata el Ministerio Público, ambos, que tienen otros dos hijos, uno menor en el momento de los hechos, habrían mantenido desde la infancia de su hija una actitud "que rebasa ampliamente los límites de la corrección educativa como progenitores" y habrían creado un "clima de violencia producto de la difícil situación del núcleo familiar por conflictos entre la pareja".

Añade que habría "configurado" un modo de "relacionarse entre si" en el que era "frecuente" que "insultasen, menoscabasen la seguridad de su hija o le profiriesen expresiones como ´te voy a hacer la prueba de virginidad y si no eres virgen, te mato´ o ´no tienes que relacionarte con amigos porque eres una puta, una guarra y basura"´".

El fiscal señala que las "humillaciones constantes" y las prohibiciones para salir a la calle, estudiar, usar el teléfono o relacionarse con alguien fuera de la familia llevaron a la menor a padecer un "cuadro de ansiedad y autolesiones".

Detalla que tras el alta médica en la Unidad de Salud Mental en la que precisó asistencia, los episodios de "amenazas, humillaciones y presión psicológica" por parte de la madre "se intensificaron".

En concreto, apunta que presuntamente la "aisló" hasta impedirle que continuará sus estudios, la amenazó con "enviarla a Bélgica", o que se hizo "pasar por ella para romper con su novio por teléfono".

"Todo ello generó temor en la víctima a salir de su habitación, a comer o cualquier actividad normal dentro del domicilio hasta que interpuso denuncia y entró en el sistema de acogida", recoge el escrito de calificación provisional.

La Fiscalía señala que la menor, una vez cumplida la mayoría de edad, ha podido retomar sus estudios universitarios, aunque sufre "consecuencias psicológicas derivadas del proceso vivido de violencia y continúa expresando mucho temor a desplazarse sola por la calle" por si se encuentra "con sus progenitores".

Al margen de la pena privativa de libertad, el Ministerio Público solicita que se les prohíba contactar o acercarse a la víctima a menos de 500 metros por periodo de tres y cinco años, y el porte de armas. Pide, asimismo, que el padre y la madre la indemnicen con 3.000 euros por daños morales.