Conversaron sobre el mundo rural, literatura oral y la naturaleza a partir del último libro de Rivas, La tierra oculta, un recopilatorio de algunas de sus obras más icónicas. Manuel Rivas (A Coruña, 1958) es una persona divertida, irónica. Así se mostró en la Villaespesa. Narrador de buenas historias desde que empezó en la prensa local siendo un adolescente haciendo de todo, incluso en verano se encargaba del horóscopo que elaboraba en función de la edad una novieta. El público le preguntó sobre su novela La lengua de las mariposas, adaptada al cine con gran éxito por José Luis Cuerda en 1999 con el añorado Fernando Fernán Gómez en el papel de un profesor considerado enemigo del régimen fascista. En las pantallas suena El maestro que prometió el mar y los que pudimos verla en Almería nos trajo el recuerdo del trabajo de Rivas con su sensibilidad especial por la gran interpretación que hace el actor Enric Auquer, conmovedora historia real, del maestro republicano Antoni Benaiges y la dirección de Patricia Font. Ahí aparece la imprenta inspirada en el pedagogo francés Célestin Freinet (1896-1958) y su práctica democratizadora de la educación con los niñ@s utilizando su propia imprenta. La obra sobre este docente apasionado está basada en el libro del periodista Frances Escribano (Barcelona, 1958) que cuenta con dos premios Ondas y es autor de distintas obras como Cuenta atrás. La historia de Salvador Puig Antich (2001), también llevada al cine por Manuel Huerga.
Como en La lengua de las mariposas, habló sobre historias pequeñas que cuentan el mundo entero y de una lucha constante contra la extinción. Confesó que su obra la ha visto en el cine en una docena de sitios de España y en sus viajes por el mundo entero. Afirmó que las reacciones siempre fueron las mismas y que más de un pedagogo se identificaron. Puso el ejemplo de un iraní que había huido por montañas, perseguido porque ejerció como maestro al estilo del personaje de La lengua de las mariposas. También toca otros en su trabajo asuntos como la Inteligencia Artificial. Se refirió a ella en varias ocasiones y criticó “la descivilización” cuando hay una suspensión de las conciencias que “se van de vacaciones” en que se refirió de alguna manera al espía que llevamos en el bolsillo, el móvil que sabe todo de nosotros. En el nuevo trabajo de Rivas, La tierra oculta, reúne aquellas de sus obras que tienen en común la condición de literatura de la naturaleza, un manuscrito de la tierra, entendido como espacio real y simbólico de emergencia, abandono, crisis y lucha contra la extinción, en un momento de especial preocupación por el calentamiento global. Recordó el grito de los pescadores o navegantes cuando se aproxima la tragedia con gritan mayday, me muro o ayúdame. “Vivimos una época de Mayday, de emergencia planetaria, mientras los viajeros del nuevo Titanic compiten por ocupar los mejores camarotes”. Lo relacionó cuando ves que el mundo es frágil, incertidumbre con guerras, hambre y desigualdades. Rivas revió su infancia y la del mundo rural, muy parecido a las tertulias que se producen en los pueblos. El saber de la vida, historias vividas y contadas. “La literatura oral es fundamental para recuperar la memoria”. Tertulias, el reencuentro de vecinos escuchando las aventuras de los pescadores, relatos de emigrantes, los cuentos desde la historia de un afilador hasta la peripecia de un emigrante. Qué haríamos sin la memoria, se preguntó y se refirió a que “también somos lo que olvidamos”
Habló sobre la resistencia. “La idea de contar cuentos es algo que atraviesa la historia de la humanidad, una buena idea para resistir”. Hay miedo a no tener nada con los amigos y sobre todo por la familia. “El abandono que más duele es el de los más cercanos”. Se enfrentó a los agoreros que vaticinaron que la televisión acabaría con la radio y los que pusieron fecha de caducidad a los libros para 2020. Todo narrado con humor. Le acompañó Mar de los Ríos, autora de varias obras como Que no se entere la Cibeles y Tren de lejanías. Mostró su agradecimiento al público asistente y alabó la trayectoria de Rivas. “He presentado a muchos escritores y me ha encantado su inteligencia y la forma de narrar porque de cada historia que cuenta aparecen otras”. Conversaron sobre una literatura en la que todo habla, personas humanas y no humanas, y en la que la imaginación es una llave para adentrarse en otras realidades. Rivas es un escritor de larga trayectoria, premiado en numerosas ocasiones y reconocido en 2022 como uno de los escritores gallegos con mayor proyección internacional con la Medalla de Oro al Mérito en Bellas Artes.
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