Más de 4.600 kilómetros en autocaravana para disfrutar del sol almeriense

El autocaravanismo es desde hace varios años un fenómeno en auge en la provincia de Almería, destacando la creciente presencia de estas casas sobre ruedas en la capital, donde el vacío legal de las ordenanzas municipales facilita que se hayan creado asentamientos con decenas de estos vehículos, en cualquier época del año, en zonas como El Bobar, el nuevo parking del Delta del Andarax o la explanada junto al Parque de las Familias.

Al proporcionar los medios básicos para viajar (transporte y alojamiento), que puede estacionarse en distintos espacios a decisión del viajero y que resulta, normalmente, más económico que otro tipo de turismo como el de hoteles, no es de extrañar que su uso sea cada vez mayor en Europa, siendo Almería un destino referente, incluso en temporada baja, para muchas familias que llegan por carretera desde países como Francia, Alemania, Holanda  y Bélgica, sobre todo.

Enamorados de Almería

Extranjero de avanzada edad. Este es el perfil de autocaravanista que más se ve en la capital. Es el caso de Nico y Coby, un matrimonio holandés que está estos días en Almería, tierra que visitan cada año por estas fechas desde hace una década pese a los más de 2.300 kilómetros, y otros tantos de vuelta, que hay por carretera entre esta tierra y su país natal.  

"Almería es una ciudad bonita, al igual que su entorno. En los meses de invierno hay un clima hermoso para nosotros los norteños", afirma el holandés de 72 años de edad, que este miércoles atendió a La Voz de Almería en el Delta del Andarax, donde está ubicado el completísimo vehículo en el que hace vida con su esposa esta semana, con unas privilegiadas vistas al Mar Mediterráneo que tienen también cerca de cuarenta vehículos de este tipo estos días.

Ya jubilados, estos holandeses aseguran que les encanta viajar en autocaravana, puesto que aman "la libertad de decidir dónde viajar". Un sentimiento que comparten con "franceses, alemanes y belgas", otras nacionalidades que están representadas estos días en los tres enclaves autocaravanistas más conocidos de una capital en la que consideran que "hay escasez de campamentos para caravanas. Faltan parcelas, zonas de acampada y dormitorios para viajeros".

Gastos de hasta 400 euros semanales

Extécnico de una empresa química, Nico es un apasionado de las tapas de Almería, siendo sus favoritas las de costilla de cerdo o lomo. Y es que, pese a las críticas que este tipo de viajeros reciben por su supuesta baja aportación a la economía local, deja claro que "nosotros compramos comida en negocios locales, vamos a restaurantes y nos abastecemos de combustible aquí", además de usar otros servicios, ya que "la autocaravana necesita mantenimiento una vez a la semana. Hay que recoger agua y vaciar el tanque del inodoro en áreas de servicio habilitadas". No obstante, reconoce que su gasto semanal suele ser "de 300 a 400 euros", recalcando que "es una cantidad que puede variar dependiendo de los ingresos personales de cada autocaravanista".  

Según la normativa actual, se permite que las autocaravanas estacionen siempre y cuando no se desplieguen elementos proyectables, toldos, sillas o mesas que invadan una superficie mayor a la del perímetro de dicho vehículo cerrado, teniendo dicho estacionamiento un tiempo limitado de 48 horas. Nico y Coby lo cumplen a rajatabla, pero basándose en su experiencia detallan que "mientras se respete el entorno, no se tire basura y no se acampe, hay una política de tolerancia por parte de las autoridades locales".

El matrimonio disfruta del sol primaveral de Almería, sentados en silencio en unas pequeñas sillas pegadas a la matrícula frontal de su autocaravana, sin molestar a nadie, regalando una sonrisa a cada persona que camina por el Paseo Marítimo. Aquí, en tierras almerienses, encuentran cada año la tranquilidad y el clima que necesitan. También han recorrido en varias ocasiones el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, al que definen como "una preciosa reserva natural", pero les extraña que en esa zona "muchos restaurantes están cerrados en invierno". 

Otros perfiles en el entorno del Delta del Andarax

Además de autocaravanas, existen otros formatos de transporte para hacer este tipo de turismo como son las furgonetas camperizadas, usadas sobre todo por gente más joven, relacionada normalmente con la práctica de deportes como surf, windsurf o kitesurf, que viajan hasta Almería cuando las condiciones climatológicas son las idóneas para realizar dichas disciplinas acuáticas.

También hay caravanas, que van remolcadas por otro vehículo. En El Bobar hay una en la que vive Andrés con su mujer y su mascota. En este caso no hacen turismo, es una familia sin recursos que va cambiando de ubicación cada cierto tiempo, respetando la normativa de no ocupar espacio público con sillas y mesas. Argumentan que "no vivimos aquí por gusto, pero no nos queda otra", considerando que "los que más disfrutan de este tipo de transportes en Almería suelen ser personas de otros países", a los que llaman, sin maldad, "los ricos de las autocaravanas".