La conclusión de las obras de la Plaza Vieja conlleva dedicar, por fin, el edificio del Preventorio para el uso que inicialmente se adquirió, formar junto al nuevo edificio que se construyó a su lado, un espacio museístico para la ciudad.
Para esa transformación, además de para convertirlo en un lugar eficiente energéticamente hablando, se busca un equipo de arquitectos que redacte el proyecto que unifique de alguna manera ambos edificios.
Esta redacción de proyecto salió a concurso por una cuantía total de 255.956 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses. Once fueron las empresas que presentaron sus propuestas para hacerse cargo de estos trabajos mientras que finalmente son nueve las que han quedado en liza después de las diferentes mesas de contratación.
El proyecto en cuestión se adjudicará a través de una resolución de la concejal de Obras Públicas, Servicios Municipales y Economía Azul, Sacramento Sánchez, y a partir de ahí habrá cuatro meses para la llegada del diseño con el objetivo de que en este año o principios del siguiente comience la obra. Hay que tener en cuenta que la ayuda recoge que los trabajos tienen que acabar en marzo de 2026.
Las obras cuyo coste está previsto que asciendan a 3.622.444,71 euros, corresponden en un 20%, 756.386,39 euros, a aportación municipal y el resto llegan desde el Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos de entidades locales (PIREP).
Proyecto
La idea municipal con esta iniciativa, la diseñe quien la diseñe, es que sea “un edificio modélico en ahorro energético, con materiales ecológicos, accesibilidad universal y didáctico en su utilización”.
Así se busca ampliar los usos del museo, “se interviene en la envolvente del edificio mejorando su estética con una imagen de edificio singular, moderno y ecológico, se renuevan los sistemas de climatización y la iluminación natural y artificial, y se genera la energía necesaria para su propio
consumo”. Se habla de que el proyecto integral permitirá el ahorro de más del 98% de energía.
Entre las novedades que tendrá el museo que ya conectará de forma definitiva ambos edificios, es que tendrá acceso universal con ascensor, aseo, rampa, punto de atención e itinerario accesible, así como una rotulación adaptada para personas con capacidades diferentes. En aspecto energético, contará con una pérgola fotovoltaica, geotermia superficial y chimeneas solares, un atrio bioclimático, iluminación eficiente con luces led y sensorización, además de contar con climatización radiante en invierno con solartermia y aerotermia en verano.
Creación de ecosistemas
Como curiosidad se recoge dentro de los planes con los que consiguió la ayuda, la creación de ecosistemas dentro de estos inmuebles. Para ello, se va a poner en marcha un jardín vertical que se ubicará en una de las fachadas laterales. Además, se contará con una cubierta verde ecológica en la planta más alta del espacio museístico.
Contará con un estacionamiento con carga para bicicletas y patinetes eléctricos. Se ha previsto un humedal para la depuración de aguas grises para la reutilización del riego de la cubierta verde y la fachada vegetal.
Habrá un espacio para la recogida de agua de las cubiertas, acumulación en depósitos enterrados y filtrado para uso en limpieza y riego.
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