Jonathan Moya González, presunto asesino de la niña onubense Míriam Cuerda, prestará declaración el próximo 30 de abril en el Juzgado de Instrucción número Dos de Almería, esta vez como víctima.
El joven fiñanero denunció amenazas de muerte de un recluso interno en un centro penitenciario de la Comunidad Valenciana. Moya recibió unas cartas durante su breve estancia en la prisión de El Acebuche en las semanas posteriores a su detención por el Crimen de Abrucena (diciembre de 2012) y denunció los hechos inmediatamente.
Según fuentes judiciales, el juicio de faltas se celebrará el próximo día 30 en la Ciudad de la Justicia de Almería, aunque todavía no está confirmada la presencia de Jonathan Moya, que podría declarar por videoconferencia, un método frecuente en estos casos.
El joven se encuentra actualmente en Herrera de la Mancha (Ciudad Real), donde fue trasladado desde el centro de Albolote (Granada). Su abogado, el conocido penalista José Ramón Cantalejo, ha criticado en varias ocasiones que el alejamiento de Almería perjudica su trabajo de defensa.
Fuentes del entorno señalan a LA VOZ DE ALMERÍA que Jonathan Moya ni siquiera conocía al recluso que remitió las cartas amenazantes. Según los primeros datos, se trataría de la reacción agresiva de un interno alarmado por el relato del Crimen de Abrucena, el secuestro y la muerte de Míriam Cuerda de tan sólo 16 meses.
Riesgos
No es la primera vez que el joven fiñanero sufre situaciones de riesgo en prisión. Moya tenía antecedentes penales por, al menos, cinco casos de estafa o apropiación indebida en la compra y venta de vehículos. Conocía la prisión de Almería. Sin embargo, la muerte de la pequeña de la Palma del Condado (Huelva) supuso un punto de inflexión en su expediente y provocó una fama carcelaria muy peligrosa para sus intereses.
Inicialmente fue trasladado a Albolote y luego a Herrera de la Mancha como medida de seguridad. En Granada sufrió un agresión (leve) y se vio involucrado en algunas discusiones con internos. Su letrado negó tales sucesos e insistió en la necesidad de su regreso a Almería. Mientras, por su parte, el entorno de Raúl Ríos, amigo de Moya y acusado de encubrir del crimen, ya lamentó hace unos meses los problemas del joven en la cárcel.
El presunto asesino de la bebé onubense compareció en los juzgados por última vez en el mes de febrero en un juicio por apropiación indebida de vehículos y falsedad documental. En ese caso se hizo pasar por agente de la Policía Nacional para ganarse la confianza de sus víctimas, en la compra de vehículos de segunda mano.
El juicio se celebró en el Juzgado de lo Penal número Cinco de Almería y las partes alcanzaron un acuerdo. La vista se saldó con una conformidad y el acusado fue condenado a tres años de prisión y al pago de una multa económica, según confirmó su letrada en ese asunto, Fuensanta Rodríguez.
Esta fue la última presencia de Jonathan Moya en los juzgados de Almería hasta ahora. No obstante, una semana más tarde el presunto asesino de Míriam Cuerda solicitó al juez instructor del Crimen de Fiñana una nueva comparecencia para aportar supuestos datos adicionales sobre las circunstancias que rodearon la muerte de la pequeña.
Más información en la edición impresa
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/12/almeria/58359/jonathan-moya-a-juicio-por-amenazas-de-muerte-en-prision