La mediación extrajudicial de conflictos gana terreno como alternativa a los duros y, con frecuencia, interminables procesos judiciales. Los usuarios alcanzan acuerdos en menos tiempo, participan de las soluciones y, de paso, colaboran para no sobrecargar los saturados juzgados almerienses.
Con estas bases, el Colegio de Abogados de Almería celebró ayer el Día de la Mediación, una cita dirigida a la difusión de las ventajas de esta fórmula entre la ciudadanía de la provincia. La institución organizó una stand informativo a las puertas de la Ciudad de la Justicia de Almería con un grupo de profesionales encabezado por la diputada séptima de la Junta de Gobierno, Elena Cara.
Además, preparó un coloquio a las 19 horas con la presencia de Isabel Bonillo, miembro de la Asociación Europea de Jueces para la Mediación, y de Lourdes Molina, actual presidenta de la Audiencia Provincial de Almería.
El Colegio de Abogados creó un registro de mediadores en 2012 y cuenta con unos 200 letrados inscritos. Además, realiza cursos de especialización y facilita a los ciudadanos interesados en someterse a la mediación una sala en su sede en la capital.
Asimismo, en los últimos años ha suscrito acuerdos de colaboración con los jueces decanos de Almería, El Ejido, Berja y Roquetas de Mar para derivar a los servicios de mediación a los ciudadanos interesados en alcanzar acuerdos extrajudiciales.
La mediación es una fórmula voluntaria, alternativa a los pleitos. Congela el procedimiento judicial mientras se ‘negocia’, pero, si no hay acuerdo final, permite continuar con el asunto en la vía ordinaria.
Las ventajas
Los abogados han apostado fuertemente en los últimos años por especializarse como mediadores, como una nueva opción profesional, aunque otros colectivos también se han enfocado al sector y ofrecen sus servicios.
Además, la Junta de Andalucía impulsó la denominada Fundación Mediara para potenciar la resolución extrajudicial. El consejero de Justicia, Emilio de Llera, ha firmado esta semana un acuerdo con 40 entidades para fortalecer los mecanismos de Mediara y su alcance social.
De Llera ha subrayado que la mediación “permite a las partes gestionar y resolver sus propios conflictos, crear la solución, con la satisfacción compartida que esto conlleva”. “Una sentencia, difícilmente, logra la satisfacción unánime y plena de las partes”, ha señalado el consejero, quien ha avalado un sistema “mucho más rápido y económico” y que carece “del componente emocional asociado a los pleitos”.
Además, ha destacado que “es necesario romper la dinámica actual de recurrir continuamente a los juzgados para resolver cualquier conflicto y para ello hace falta mucha pedagogía social para conseguir un cambio de mentalidad en la ciudadanía, un proceso que sólo puede afrontarse poniendo el foco en los múltiples beneficios que nos aporta la mediación”.
La práctica de la mediación implica directamente al ciudadano y le proporciona la capacidad real de poder elegir la manera de resolver su conflicto, participando en la elaboración de su solución con la ayuda del mediador. Según el consejero, la búsqueda de la mediación es un “éxito”.
Una medida para evitar la sobrecarga
Todos los informes sobre la Administración de Justicia destacan la alta litigiosidad de los juzgados almerienses. Los ciudadanos acuden con mucha frecuencia a los tribunales y, debido a limitación de recursos existentes, los profesionales del sector sufren los efectos de una justicia muy lenta e ineficaz. En este sentido, la mediación es una opción más rápida para las partes y, al mismo tiempo, una alternativa para descongestionar los juzgados. Funciona con grandes resultados en el Juzgado de Menores de Almería (en colaboración directa con la Consejería de Justicia e Interior) y da sus primeros pasos en ámbitos como familia y el arbitraje mercantil.
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