PP puede perder cinco concejales y ganarlos Ciudadanos

El escenario político de la ciudad de Almería que salga de las urnas el próximo domingo puede complicársele al Partido Popular, que ahora gobierna con una holgadísima mayoría absoluta de 18 concejales. 

Luis Rogelio Rodríguez Comendador, actual alcalde y candidato a la reelección, no tiene asegurado el concejal número 14, el que le daría automáticamente la llave de un nuevo gobierno en solitario en el Ayuntamiento de la capital. 

Un estrecho margen de votos separa al candidato del PP de tener cuatro años de estabilidad en la alcaldía o de depender de pactos con alguna otra formación política, según desvela la encuesta de Deimos Estadística para La Voz de Almería. 

El sondeo refleja que el PP de la capital podría perder de 16 a 20 puntos de apoyo electoral (con una horquilla del 41,15% al 38,91% de votos frente al 58,5% de las últimas elecciones) y entre cuatro y cinco concejales (se mueve entre 13 y 14 frente a 18 de la última vez).

Ligera subida del PSOE

La segunda fuerza política continúa siendo el PSOE, que  mejora su posición en el pleno municipal y tiene posibilidad de llevar hasta el 26% su porcentaje de votos -tuvo el 22,8% hace cuatro años- y pasar de 7 a 8 concejales. 

La candidatura encabezada por Juan Carlos Pérez Navas lograría así elevar ligeramente los resultados respecto al suelo electoral que marcaron los comicios de 2011 para los socialistas en la capital, pero no en la medida de las expectativas. 

El principal beneficiario de los votos que se le van al Partido Popular es, según la encuesta, Ciudadanos. La candidatura del partido de Albert Rivera, que en la capital almeriense encabeza Miguel Cazorla, conseguiría un exitoso resultado de entre el 14 y el 16% de los sufragios y entraría en la composición de la corporación municipal con  cuatro o cinco concejales. Con esa representación, el partido naranja podría convertirse en clave para la formación del próximo Gobierno del Ayuntamiento de la ciudad. 

El concejal 14 se va a la izquierda

El concejal de la mayoría absoluta que el PP tiene en el aire caería del lado de la izquierda. Y ahí la liza está entre tres partidos: Izquierda Unida-Partido de la Gente, Ganemos y Ahora Almería.

Los tres se mueven en una horquilla de votos muy similar: Ganemos entre el 5 y el 6% e Izquierda Unida y Ahora Almería del 4,5 al 5,7%. Los tres tienen por delante una expectativa de entre 0 y un concejal. De ellos, solo Izquierda Unida cuenta en estos momentos con presencia en el Ayuntamiento,  dos concejales. La candidatura que encabeza Rafael Esteban se disputa así mantener la representación en la corporación municipal con dos formaciones de reciete aparición que presentan como cabezas de cartel a Mª Carmen Murillo (Ganemos) y Fernando Plaza (Ahora Almería).

En Almería capital, el porcentaje de voto decidido que revela la encuesta deja todavía un margen abierto. Así, casi un 62% de las personas entrevistadas por Deimos dice tener ya claro a quién va a apoyar el próximo domingo, mientras que un 38% asegura no haber tomado aún una decisión respecto a su voto. 

Es una sociología electoral en la que el 58% de los electores dicen guiarse más por la identidad del partido a la hora de pronunciarse que por la persona de los candidatos que se presentan. No obstante, los votantes del PP son los únicos que prefieren votar la persona del candidato que las siglas (44,5% frente a 26,8%).

Pactos posibles

Junto a la intención de voto y la valoración de candidatos, la encuesta incluye también preguntas sobre preferencias de pactos poselectorales. Un asunto que en el caso de la capital cobra más interés  por el probable escenario de ausencia de mayoría absoluta. 

Y ahí los ciudadanos se decantan mayoritariamente por un acuerdo entre el PP y Ciudadanos (un 21% de quienes contestan a esta pregunta). Menos convencen la opción de pacto entre el PP y PSOE, que apoya un 11%; entre PSOE e Izquierda Unida, por la que apostaría un 9,8%, o entre PSOE y Ciudadanos, que mencionan un 9,4%. 

Son, con todo, más los encuestados que no se pronuncian sobre ninguna variante de acuerdo y se apuntan al “no sabe, no contesta”.