La seguridad de quienes se trasladan a la Universidad de Almería sobre dos ruedas preocupa al colectivo universitario.
Al menos cuatro robos se han constatado que se han producido en los últimos meses en el carril de bicicletas que une la ciudad con el Campus de La Cañada. En concreto, en el tramo situado entre la costa y la Desaladora de Almería, que discurre paralelo a la costa.
El problema lo suscita la poca iluminación que hay, dado que las farolas existentes están en la zona del Paseo Marítimo. Y a esto, se une la ubicación de un seto que funciona de frontera con la carretera facilitando el aislamiento del lugar.
Robos
Miguel Pérez, trabajador de la Universidad ha sido una de las víctimas. Relata a LA VOZ cómo al salir de su puesto de trabajo, entorno a las diez de la noche, dos jóvenes, encapuchados, se “abalanzaron” sobre él a punta de navaja llevándose finalmente todo lo que portaba: la bicicleta, móvil, libro electrónico y documentación. “No es el primer suceso de este tipo que ocurre, así lo comprobé cuando me dirijí a la Comisaria de Policía y los agentes me informaron de que se había interpuesto otra denuncia en la misma zona. Es una situación que me preocupa porque somos muchos los que nos estamos animando a ir a la Universidad de Almería en bicicleta y este tipo de cosas crean cierta inseguridad”, declara Pérez. Para evitar estos ‘sustos’ muchos ciclistas están optando por circular por la propia carretera, junto a los vehículos porque aunque “supone un mayor riesgo” sí les otorga visibilidad y con ella se disuade a los 'cacos'.
Para este aficionado a la bicicleta la solución pasaría por una actuación de pequeña envergadura “simplemente con podar el seto para que permita una mejor visibilidad y aumentar los puntos de luz en la zona”.
Ayuntamiento
De momento, las quejas por esta situación se han trasladado a los vicerrectorados de Estudiantes y de Infraestructuras, dependientes de la Universidad, y también al propio área de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Almería.
Precisamente su responsable, María Vázquez confirmaba a LA VOZ que ya se ha contemplado “la incorporación de nuevos puntos de luz” en varias zonas de carriles de bici, entre ellos el que se dirige a la Universidad. Una actuación que “depende ahora de la aprobación de los presupuestos municipales para el año 2016”. Asimismo se dará traslado a la concejalía de Medio Ambiente para que incluya, en su plan de poda, el acondicionamiento de este seto, mejorando la protección de los ciclistas y, finalmente, se ha informado a la policía local de determinados puntos negros susceptibles de atraer a los 'amigos de lo ajeno' para que se pueda implementar la presencia de efectivos en la zona. Mientras tanto, deberán extremar la precaución quienes circulen principalmente en horario nocturno.
Puntos negros
Desde el colectivo de ciclistas ‘Doble Fila’ aseguran que la falta de iluminación en los carriles bici se repite en varios puntos de la ciudad. Al trazado que discurre entre Almería y la Universidad se añade la ciclocalle que une la Vega de Acá con el Club Náutico y los tramos que recorren el Parque del Andarax. Julio Valdivia, miembro de la organización, recuerda que estas son “zonas alejadas del casco urbano y por tanto han de estar especialmente iluminadas para dar seguridad a los usuarios de los carriles”. Por otro lado, y sobre la Universidad, Valdivia reclama el aumento de aparcabicis, en la actualidad “insuficientes” para atender al demanda de los usuarios del Campus. Además, piden que estos sean de ‘u invertida’ no de rueda delantera como los actuales porque son menos seguros y por tanto, facilitan los robos.
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