Aznar echa de menos más contundencia contra el "golpe de Estado" de Cataluña

El expresidente del Gobierno y presidente de la Fundación FAES, José María Aznar, ha asegurado en Hoy por Hoy, en su primera entrevista en 21 años en la Cadena SER, que la crisis catalana es "la situación más difícil que estamos viviendo desde la Transición".

Aznar ha evitado criticar abiertamente la gestión que ha hecho Mariano Rajoyde la crisis -"es el momento de apoyar a las fuerzas constitucionalistas, que son el PP, el PSOE y Ciudadanos"- pero sí ha señalado que "ha faltado política". “El proyecto independentista ha crecido mucho desde 2006-2007. En 2004 el voto independentista no llegaba al 10%. Algo habrá pasado. Ha faltado política, los partidos constitucionalistas han dejado un margen para la política secesionista enorme, y cuando los vacíos existen, los cubren otros. Ha habido un déficit de política muy grande”, ha explicado Aznar.

Según el expresidente, en 2011, cuando Rajoy ganó las elecciones, él ya le advirtió sobre las intenciones de los independentistas. "Yo le dije al presidente, el tema más importante que vas a tener que resolver no es ese [la crisis económica, es la secesión de Cataluña".

José María Aznar ha defendido la intervención de Cataluña como un “acierto” – “la aplicación del artículo constitucional cuando se da un golpe de estado me parece un acierto” -, y ha insistido, en varios momentos de la entrevista, en la importancia de que los partidos constitucionalistas – para él, el PP, el PSOE y Ciudadanos – expliquen su proyecto de cara al 21 de diciembre.

“Lo que van a hacer los independentistas ya me lo imagino. Lo que van a hacer los constitucionalistas es muy importante. PSOE y PP deben pedir una movilización grande, pero deben explicar para qué piden el voto de las personas. Es muy importante que aclaren qué quieren hacer para el futuro de España después de las elecciones".

El expresidente del Gobierno ha rechazado que la recogida de firmas iniciada en su día por su partido, por el PP, en contra del Estatut se cuente entre las posibles causas que han originado la escalada independentista. “A mí me parece que eso es injusto, me parece injusto decir que ahí empezó la fractura en Cataluña. Los responsables de dar un golpe de estado son los responsables de dar el golpe de estado”, ha insistido Aznar, que se ha limitado a señalar que “algo habrá pasado” para que el voto independentista se haya multiplicado, y ha insistido en la idea de que “ha faltado política”. Según él, ya en 2002, cuando el PP ganó con mayoría absoluta, “le ofrezco al presidente de la Generalidad, a Jordi Pujol, entrar en el gobierno. Porque sé que se está produciendo un debate importante en el nacionalismo catalán sobre qué camino seguir. Él me dice en ese momento que no considera válido el pacto constitucional”.

Para el expresidente del Gobierno, que ha descartado que vaya a fundar un nuevo partido, las formaciones políticas “no viven su mejor momento”. “Soy afiliado del PP, no tengo ninguna intención de dejar de serlo. No voy a fundar ningún partido, pero soy sólo afiliado”, ha remarcado Aznar, que ha insistido en que no se siente responsable, a ningún nivel, de las prácticas supuestamente corruptas en su partido, de la trama Gürtel, durante un periodo en el que él era el líder del PP. “Yo, francamente, no me ocupaba de la gestión ordinaria de esas cosas ni confiaba la organización de actos electorales a nadie porque no era mi responsabilidad”, ha señalado José María Aznar, que ha asegurado que no conocía a Francisco Correa, líder de la trama y uno de los asistentes a la boda de su hija. “Posiblemente nos hayamos saludado alguna vez, pero poco más. No he tenido relación con esa persona”, ha zanjado, preguntado sobre si sentía algún tipo de arrepentimiento. Sí ha defendido, abiertamente, su decisión de elegir como vicepresidente a Rodrigo Rato. “Fue un político formidable y un vicepresidente formidable, que contribuyó al progreso de España. Se equivocó él. Pero yo por hacerle vicepresidente y ministro seguro que no me equivoqué”.

Tampoco ha hecho autocrítica, al contrario que, por ejemplo, Tony Blair –entonces primer ministro británico-, sobre la participación de España en la guerra de Irak. “No voy a pedir disculpas por defender el interés nacional de España. En este momento no hay armas, no había armas, pero no hay dictador. En Siria, hay dictador y hay armas. Los costes de una intervención son unos y los costes de una no intervención son otros. Miren de dónde vienen los refugiados y a consecuencia de qué. Hay no decisiones que provocan efectos devastadores”, ha defendido Aznar, que ha mantenido, también su posición sobre las motivaciones de los atentados del 11-M. “La sentencia la creo, y creo que los que hicieron el 11-M sabían lo que querían hacer. Estaban aquí porque lo hicieron aquí. Eran los que eran. Lo dice la sentencia. Lo que digo es que sabían lo que tenían que hacer y lo hicieron”, ha insistido Aznar, que ha remarcado que no modifica “ni una letra ni una coma de lo que dije entonces” preguntado sobre su afirmación de que los que idearon el 11M “no están ni en desiertos remotos ni en montañas lejanas”.