La demanda de limón para los gintonics del verano dispara este año los precios

La escasa cosecha de limón por las altas temperaturas y la falta de cuaje ha hecho que los precios de mercado se disparen ahora en verano, ante el incremento de la demanda del sector de la restauración y la coctelería.

La estimación de la Ailimpo, la Interprofesional del sector, es que la merma de producción esta campaña en la provincia de Almería ha sido del 30%. “La campaña que empieza en septiembre y termina en julio se ha visto afectada sobre todo enlas variedades tardía como la Verna, puesto que el calor de mayor abrasó la flor en muchas hectáreas”, explica José Antonio García, director de la organización.

Sin embarga esta pérdidas de cosecha -Almería es con  32.000 toneladas la segunda productora de Andalucía tras Málaga- ha revitalizado el precio medio que, en origen, a pie de árbol, se ha cotizado a 0,60 euros, frente a una media de 0,40 de años anteriores, con un coste de producción de 0,17 euros. El precio en destino se ha visto incrementando hasta los dos euros para el consumidor final. La mayoría del limón almeriense se produce en las vegas del Almanzora y del Andarax y suele venderse a pie de finca a comercializadoras murcianas como García Aranda, proveedor de Lid, o Tana, de Mercadona. Ante la falta de género, los agricultores ampliarán la campaña hasta agosto con el denominado limón de rodrejo, de calibre más pequeño, pero bien cotizado en años de carestía.

Para completar la falta de producción local en estos meses de verano entran al mercado almeriense grandes cantidades de limón de origen argentino, surafricano y chileno.

El limón es un producto en expansión en el campo almeriense, al contrario que la vega granadina que ha perdido  volumen por la expansión urbanística.

Uno de los revulsivos, explica García, es “sobre todo la demanda de la hostelería para los cócteles de verano y especialmente el popularizado gintonic que requiere de rodajas de limón”.

El 'Limón Dorado' de Arboleas
Antonio y Martín Bonillo García son dos hermanos de Arboleas, cuarta generación de citricultores, que dieron un paso al frente hace un año para comercializar su producto ‘Limón Dorado’ al consumidor final. Son limones ecológicos tipo gourmet, que venden en estuches sin intermediarios murcianos de por medio. Su experiencia le ha servido para abrir nuevos canales de venta con una producción mermada este año de 30.000 kilos en cuatro hectáreas. El jugo de sus limones van directamente a la pared del vaso ancho.