Almería fue una de las provincias españolas que más sufrió las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria de 2008; fue una de las zonas españolas que, en términos relativos a su población, más construyó primera y segunda vivienda, convirtiéndose en un refugio de los inversores ante el escaso precio del dinero. Han pasado 15 años de aquellos complejos momentos para el sector de promoción inmobiliaria y de la construcción y se han ido recuperando sensaciones perdidas de venta de suelo y de ejecución de obra nueva, de grúas y de ladrillo.
Un informe recién salido del horno de Solvia, la empresa de servicios inmobiliarios vinculada al Banco Sabadell, ha situado a Almería entre las provincias con mayor número de visados de obra nueva, 1.069, en concreto la sexta del país, tras Madrid, Barcelona, Málaga, Sevilla y Alicante, en el primer trimestre de 2023. En conjunto, las seis suponen el 51% de las licencias concedidas en España, que suman 108.923 hasta abril, un número de licencias que no se veía desde 2009, según los datos del Ministerio de Transportes Movilidad y Agenda Urbana. Sin embargo, a pesar de estos rebrotes evidentes, la provincia almerienses sigue siendo una de las que acumular un mayor stock de vivienda nueva sin vender, en términos porcentuales a sus habitantes, debido, sobre todo, a ese carácter inversor con el que se forjaron muchas de las promociones del boom inmobiliario.
Las zonas más dinámicas, en cuanto a nueva construcción se refiere, se sitúan en la capital, sobre todo la zona de La Vega, la costa Levantina y algunas zonas muy específicas del área metropolitana de Almería.
Tos esto choca también con la tendencia a la moderación de compra ventas de vivienda debido al fuerte incremento del precio del dinero para hipotecas, con el euríbor por encima del 4%. Sin embargo, el crédito promotor para este dinamismo constructor se entiende que se formalizó antes de los sucesivos repuntes del euríbor. Las operaciones de compraventa aumentaron en la inmensa mayoría de las provincias españolas en el primer trimestre del año. Un total de 39 mostraron avances trimestrales, frente a 11 que experimentaron descensos. En el caso de Almería, el crecimiento fue del 16%, muy por encima de la media, como en el resto de provincias mediterráneas.
Los analistas de Solvia consideran que “la evolución de las nuevas promociones se encamina hacia una moderación de la actividad durante el conjunto de 2023, mientras continúa marcada por el incremento de los precios del suelo y los costes de las obras nuevas, así como unos tipos de interés que siguen en unos niveles tan elevados que dificultan el acceso al crédito, tanto a promotores como a potenciales compradores”. Ante este contexto, el análisis de Solvia apunta a que los niveles de licencias de construcción en 2023 no superarán los niveles del ejercicio previo.
En cuanto a precios medios de compra en el primer trimestre del año, Almería se sitúa en 1.072 euros el metro, muy por debajo de la media de 1.921. En cuanto a las rentas medias del alquiler, Almería también se sitúa por debajo de la media con 7,3 euros el metro al mes.
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