Las sensaciones del sector hortofrutícola almeriense, cuando acaba de concluir la Fruit Logística, sin duda la mayor feria de frutas y hortalizas en fresco de las que se celebran en Europa y el mundo, llama al optimismo por el nivel de consolidación de los productos almerienses en los mercados.
Lo decía ayer, a modo de balance, el delegado territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, José Manuel Ortiz, al señalar que”nuestro sector productor está consiguiendo, de una forma cada vez más evidente, que la marca Almería sea sinónimo de garantía de calidad, de seguridad alimentaria y de sostenibilidad, y eso es algo con lo que no cuentan nuestros competidores directos”.
Tanto Ortiz como la consejera Elena Víboras, coinciden en que si algo ha quedado patente en estos días en el recinto de Messe Berlín es el crecimiento de la fortaleza de la horticultura almeriense en Europa, una fortaleza que tiene la virtud de abrir puertas y multiplicar los contactos con los grandes grupos europeos de la distribución.
Negociadores Una de las consecuencias más evidente de ese papel protagonista es la fluidez en los contactos y negociaciones que las empresas de la provincia han realizado en estos tres días de feria en la capital alemana, algo que han destacado los responsables de las empresas de comercialización.
La delegación almeriense en Berlín ha tenido menor presencia física en stands y pabellones, pero en cambio una legión de empresarios, directivos y comerciales han recorrido de punta a cabo los pabellones y “hemos podido ver qué traen otros países, otras zonas productoras y otras empresas, lo que al final supone una información valiosa porque nos permite saber donde estamos nosotros en estos mercados”.
Y la conclusión es que la oferta almeriense goza hoy de una calidad muy difícil de igualar, con gamas de productos amplias y bien diseñadas que se adaptan a las demandas de la distribución y, sobre todo, de los consumidores.
Aunque el optimismo existe, la consejera Víboras se encargaba de poner mesura. Coincide en el buen momento, en la excelente posición de las hortalizas almerienses, pero advierte que la batalla no está ganada, por mucho que se produzcan algunas victorias.
Sostiene que sería un error considerable caer a estas alturas en la autocomplacencia “porque este es un sector y un mercado que se mueve a toda velocidad y quedarse parado significa que te pasen por todos lados”. Es importante, en cualquier caso, “saber dónde estamos y saber cuáles son los retos que tenemos por delante, porquer no basta con estar en la primera división, tenemos que reforzarnos para estar en la Champios y para poder ganarla”.
En ese escenario se están moviendo unos empresarios almerienses que ni siquiera temen que una menor presencia física con stands o expositores sea un aspecto negativo de cara al futuro. Consideran que Almería ya tiene un papel protagonista en los mercados europeos y son los otros competidores los que deben hacer un esfuerzo para mostrar sus productos.
Y como seguridad y fortelaza no están reñidas con la prudencia o la prevención de futuro, esos mismos empresarios reflexionan sobre la presencia almeriense en Berlín, o en Madrid, y señalan que el sector hortofrutícola de la provincia debe estar, cuando menos para no dejar libre el camino a otras zonas productoras del mundo.
Pero hablando de competencia, Elena Víboras, que considera como un hecho positivo que los empresarios de la provincia acudan a Berlín a estudiar los mercados, a la competencia o a mantener un contacto directo con sus clientes, afirma también que muy probablemente la competencia no proceda siquiera del exterior, sino que
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