Con el inicio de un nuevo curso, una parroquia de Almería capital tendrá importantes novedades. Sin llegar a necesitar cerrar a cal y canto, una iglesia afrontará unas relevantes obras originadas en problemas estructurales del templo y que, en cierta medida, afectarán a la vida parroquial. Se trata de la iglesia de Santa María Magdalena, la parroquia del almeriense barrio de Los Molinos.
Las obras se han dado a conocer por el inesperado anuncio de la Hermandad de la Coronación del necesario traslado de sus imágenes titulares a la no muy lejana parroquia de San Luis Gonzaga. A través de un comunicado, la cofradía del Martes Santo explicaba que "como consecuencia de las obras de mejora y acondicionamiento que se van a llevar a cabo en nuestra sede canónica, la Iglesia parroquial Santa María Magdalena de nuestro barrio de Los Molinos, nuestros Sagrados Titulares serán trasladados a la Parroquia vecina de San Luis Gonzaga el próximo 30 de agosto".
En el mismo comunicado, la Coronación explicaba que "las obras darán comienzo en el mes de septiembre, y será a su conclusión cuando nuestros Amantísimos Titulares regresen a su templo". Además, la cofradía aprovecha la oportunidad "para agradecer de todo corazón a don Ramón Bogas Crespo, párroco de San Luis Gonzaga, por abrirnos las puertas de su parroquia y así como por su buena predisposición para con nuestra hermandad".
¿En qué consisten las obras?
Preguntado por el motivo de las obras de la iglesia, el párroco de Santa María Magdalena, Pedro Antonio Pérez, zanja la cuestión de una forma tajante, afirmando que "no merece la pena" publicar algo sobre la intervención y dejando claro, eso sí, que la parroquia no cerrará. Sin embargo, las obras sí son relevantes. De hecho, se trata de una necesaria intervención que afrontará "reformas estructurales", tal y como explican desde el Obispado de Almería.
Las obras, dirigidas por el arquitecto Miguel Nieto, se financiarán recurriendo a una parte de la subvención que otorga anualmente la Diputación Provincial de Almería a la Diócesis para afrontar obras en distintos templos de la provincia. Además, el Obispado está buscando otra posible subvención. Esas dos ayudas y los propios ahorros de la parroquia de Santa María Magdalena permitirán costear las obras estructurales de la parroquia.
En concreto, las obras consisten en una intervención de la estructura con la restauración de los pilares y zunchos (el refuerzo metálico de la estructura), además de una intervención en la cubierta, la reparación de una fisura en la pared, además de una actuación en los aseos y en el zócalo del templo.
Todo ello, si bien no obligará al cierre de la parroquia, sí hacía aconsejable que las imágenes del Cristo de Humildad y Paciencia, María Santísima de Gracia y Amparo y san Juan Evangelista sean trasladadas a otro emplazamiento. No en vano, el polvo que se generará durante las obras en la estructura de la parroquia de Los Molinos podría haber puesto en peligro la policromía de las imágenes, haciendo difícil su posterior limpieza. Así, la hermandad de la Coronación, para evitar que sus imágenes terminen mal paradas a consecuencia de las obras parroquiales, protagonizará un traslado histórico el próximo 30 de agosto, para llevar a sus titulares a otra parroquia.
Paradójicamente, San Luis Gonzaga es la eterna candidata a acoger alguna cofradía de nuevo cuño que nazca ahora en un futuro. Sin embargo, la de la Coronación será la primera cofradía que se aloje en el templo situado a escasos metros de la Bola Azul, en la espalda del Colegio Diocesano San Ildefonso.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/284/el-contador-cofrade/277340/problemas-estructurales-obligan-a-hacer-obras-en-esta-iglesia-de-la-capital