Agustín Linares
19:12 • 14 ago. 2011
El verano y el paso del tiempo, desde que se manifestaran por primera vez los -indignados- el pasado 15 de mayo, han hecho mella en la participación de los españoles con las distintas -acampadas- y asambleas provinciales.
Si bien la Acampada Almería, lucha por mantenerse activa y organiza distintos eventos, concentraciones y cumplen religiosamente con sus asambleas programadas, no se han librado de un descenso numérico en sus filas.
A partir del 15 de mayo Almería se llenó de consignas políticas en favor de la democracia, del Paseo Marítimo a la Calle Trajano y concentrándose, sobre todo en la Plaza Juan Cassinello, donde comenzaba a establecerse la acampada y a reunirse en asamblea un gran número de -indignados-.
Las protestas, concentraciones y reuniones fueron de carácter masivo hasta que a mediados de junio, tras la multitudinaria manifestación del 15-J al cumplirse un mes desde la creación del movimiento, se levantó la Acampada Almería.
Desde julio a lo que va de agosto, los -indignados- activos en la capital han disminuido dramáticamente. Sus convocatorias se han vuelto minoritarias, frente a la magnitud que llegaba a esperarse en sus inicios, llegando a reunir igual número de periodistas -o incluso más- que de ‘indignados’ en algunas concentraciones y distintas actividades.
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