El insuficiente bombeo de agua en el Acuífero Superior Central de El Ejido está provocando la anegación de más de 40 hectáreas de invernaderos y fincas agrícolas del núcleo de Matagorda debido a que el agua acumulada en el subsuelo del Poniente almeriense aflora en la superficie cada vez que llueve con intensidad. Una situación límite para los productores de la zona que están viendo peligrar la campaña si antes no se realizan más extracciones de agua para evitar las inundaciones.
Es por eso que el Ayuntamiento de El Ejido ha denunciado la situación y ha pedido a la delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía una reunión con carácter urgente para abordar las soluciones reales al problema de la crecida del nivel del Acuífero Superior, que se encuentra en la actualidad, a 28 metros por encima del nivel del mar.
Tal y como han explicado el alcalde, Francisco Góngora, y el concejal de Agricultura y Medio Ambiente, Manuel Gómez, “nos hemos reunido en varias ocasiones con vecinos y agricultores cuyas fincas se encuentran inundadas, con el riesgo de perder la producción de esta campaña”.
Una circunstancia que, además, se ha visto agravada porque la lluvia registrada en los meses de octubre y noviembre ha sido elevada, un hecho que, sumado a la cada vez menor extracción de agua del Acuífero Superior Central, “está provocando graves daños por inundación”, asegura el edil de Agricultura.
Por su parte Góngora ha subrayado que la situación necesita de una solución porque en áreas como “el paraje Soto del Agua en Matagorda muchos invernaderos se encuentran anegados debido al crecimiento de nivel freático del Acuífero Superior Central, con el consiguiente riesgo de avenidas de agua provocadas por lluvias torrenciales”.
Soluciones
El año pasado el Ayuntamiento ejidense ya puso en conocimiento de la Junta Central de Usuarios del Poniente Almeriense esta problemática y la necesidad de bombear para evitar que continúe aflorando el agua en aquellas zonas más susceptibles de inundación.
Junto a un mayor número de extracciones, el Consistorio propone que esa agua sea mezclada con la procedente de la desaladora para así poder utilizarla para regadío.
Por todo ello, el gobierno local estima oportuno una reunión urgente con la delegación de Medio Ambiente para que se desbloquee el trámite de autorización a la JCUAPA de estas extracciones para paliar la situación. “Es imprescindible que se articule un plan de extracciones de agua que evite inundaciones en zonas de la comarca, como ocurre en Las Norias de Daza con la Balsa del Sapo o en Matagorda”, ha indicado Manuel Gómez. Y es que al problema del agua ‘invadiendo’ explotaciones agrícolas hay que sumar la preocupación existente desde el Ayuntamiento por las “posibles avenidas de agua provocadas por lluvias torrenciales”, ya que hay ocasiones en que las precipitaciones no son tan intensas y también hay anegaciones.
No obstante, quienes tienen las de perder son los agricultores de Matagorda que pasan los días pendientes del cielo para que les conceda una tregua y que la campaña no termine con un saldo negativo por pérdidas mientras llega una solución.
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