La consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha anunciado la revisión y actualización del Plan Andaluz de la Caza, ya que la vigencia de la última planificación concluía en 2017, y cuyo objetivo “es adaptar el plan a la realidad cinegética andaluza”.
La Consejería también va a modificar las regulaciones especiales para poder cazar en situaciones específicas y fechas distintas a las establecidas por la Orden de Veda, de forma que incluyan a Almería y Granada, donde hasta ahora no era posible.
Un ejemplo es el caso del cerdo asilvestrado y el jabalí, cuya excepción “tiene base en los riesgos sanitarios y ambientales dado que si existe una alta densidad de estos animales, aumenta su susceptibilidad a las enfermedades e incluso podrían transmitirlas al ganado”, explican desde la Consejería.
Tras la firma de un protocolo de intenciones con el presidente de la Federación Andaluza de Caza, José María Mancheño, para el impulso y defensa de la actividad cinegética, Crespo ha detallado una serie de medidas que muestran el apoyo de la Junta al sector.
Asimismo, la consejera ha informado sobre el trabajo del Gobierno para “agilizar y finalizar” el expediente por el que se declaran la rehala y la montería como Bien de Interés Cultural (BIC), una iniciativa en coordinación con la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico a la que “en breve se va a dar trámite de audiencia”. Se trata, según la consejera se trata de “un paso importantísimo que toda la sociedad andaluza quería”.
Crespo ha puesto en valor la historia y costumbres ligados a la montería y la rehala; mientras que el presidente de la Federación Andaluza de Caza, José María Mancheño, ha señalado que esta declaración supondría un régimen de protección para el sector.
Entre las medidas a desarrollar desde la Junta, la consejera se ha referido también al encargo de un informe científico que realizará una entidad de prestigio sobre el silvestrismo, “demostrándole así a Europa que la cría en cautividad no es una solución válida”; y al desarrollo de la normativa de caza con el fin, por ejemplo, de “homogeneizar los criterios” en todas las provincias andaluzas, cuestión que responde a otra demanda de los profesionales del sector.
Además, se tramitará la orden que regule la cetrería como modalidad de caza adaptada a la actualidad en “cinco o seis meses” desde su visto bueno por parte del Comité de este sector.
Del mismo modo, ya se aborda en otra Orden la simplificación de las solicitudes y comunicaciones relacionadas con los planes técnicos y la introducción de aspectos concretos como la práctica de la modalidad de perdiz con reclamo sin muerte permitida por el reglamento en 2017.
La Consejería también abordará el reajuste de los términos municipales con declaración de daños en la agricultura como consecuencia de la población excesiva de conejos.
Asimismo, se trabaja en una resolución sobre la declaración de área de emergencia por sarna sarcópica en cabra montés, que permitirá el abatimiento de ejemplares enfermos en determinadas zonas como medida para prevenir la dispersión de la enfermedad a otros animales sanos. “Una medida que es al mismo tiempo de caza y de sanidad animal”, ha apuntado Crespo.
La Consejería pretende también iniciar una campaña divulgativa sobre la licencia de caza online, en vigor desde enero de 2019.
Por último, Crespo ha señalado que la Dirección General de Medio Natural, Biodiversidad y Espacios Protegidos aprobará la resolución que detalle los periodos hábiles de caza, desarrollando la Orden general de veda. La resolución, que se pretende publicar la primera semana de mayo, incluirá la tabla de fechas de inicio y fin de cada periodo hábil por especies y modalidades para la temporada 2019-2020.
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