Alcalde y vecinos ven “decepcionante” la reunión sobre la playa de Balerma

El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha calificado de “muy decepcionante” la reunión mantenida en Madrid con el secretario de Estado de Medio Ambiente en funciones, Hugo Morán,  “por su falta de voluntad política para salvar la playa de Balerma” y “no responder de manera positiva a las peticiones realizadas por el Ayuntamiento”.

Un mensaje muy distinto al que, este martes, tras la reunión entre Morán y Góngora, lanzaba el Ministerio para la Transición Ecológica al asegurar que “mantiene la voluntad de ejecutar las obras de emergencia previstas y que la playa pueda presentar su mejor imagen para la temporada de verano”.

En esta reunión, en la que se le informó al alcalde sobre las actuaciones de emergencia que se van a realizar en la costa de Balerma, también se dio cuenta de las conclusiones del análisis realizado por el Cedex del tramo de costa comprendido entre las playas de Balanegra y Punta del Moro.

El análisis del Cedex En este sentido, según Costas “el análisis encargado al Cedex concluye que los espigones construidos en 2015 en la playa de Balanegra no afectan a Balerma, debido a la escasa longitud de los diques y a que las celdas que delimitan se encuentran rellenas de arena y, por tanto, no interrumpen el transporte litoral. Dicho informe vuelve a proponer como mejor opción para la zona, la gestión del sedimento”.

Y es aquí donde surge la más clara diferencia de interpretaciones de este estudio por parte de las dos administraciones. Así, desde el Ayuntamiento insisten en que “los datos emitidos en el último informe del Cedex se reconoce explícitamente que se considera que es posible que la construcción de los espigones de la playa de Balanegra en 2015 generase un problema de erosión”.

El alcalde de El ejido ha remarcado que “hay falta de voluntad política por parte de Costas para salvar la playa de Balerma” ya que desde el Ministerio se insiste en que los únicos trabajos que se van a acometer serán los de retranquear el Paseo y verter 13.000 metros cúbicos de arena, “una medida, esta última, a todas luces insuficiente ya que la cantidad que se debe aportar para proteger la zona de Las Cuevecillas y el frente litoral de Balerma debe ser entre 50.000 y 60.000 metros cúbicos como se ha hecho años anteriores”.

Según ha asegurado Góngora, “sin ese aporte de sedimento, el verano en Balerma se complica ya que no se va a poder garantizar la estabilidad de la playa ni la seguridad de las fincas y explotaciones agrícolas en Las Cuevecillas al estar supeditado todo ello a las inclemencias meteorológicas que podrían alterar en cualquier momento la dinámica en función de los temporales, como viene sucediendo.

La reunión ha contado también con la presencia de Fran Fernández, portavoz de la ‘Plataforma SOS Balerma’, quien ha suscrito las palabras del alcalde y ha añadido que “ya hubo un estudio que analizó el impacto de dos sobre cuatro de los espigones de Balanegra sobre el litoral de Balerma lo que reconoce un fuerte cambio”.

El alcalde ha recordado que el núcleo de Balerma es un importante punto de referencia turística en El Ejido que recibe miles de visitantes durante el verano, por lo que este hecho afectaría de forma notable a la economía de la localidad, en cuanto a los alquileres de apartamentos en el periodo estival o al sector comercial y hostelero.

Sobre la adopción de medidas estructurales, el Ministerio señala que el tratamiento definitivo de la costa de Balerma, como del resto del litoral almeriense, debe preverse en la futura Estrategia para la Protección de la Costa de Almería, lo que según Góngora se puede demorar a 2023.

Según ha informado el Ministerio para la Transición Ecológica, las obras que se van a realizar en el litoral de Balerma, que cuentan con un presupuesto de 200.000 euros, pretenden la restauración y conservación del dominio público marítimo-terrestre para asegurar la sostenibilidad de la costa y mitigar los efectos de futuros temporales. Los trabajos consisten, fundamentalmente, en la demolición y posterior reconstrucción del muro dañado en el paseo marítimo, que invade el dominio público marítimo terrestre, retranqueándolo para disminuir su exposición a los efectos de los temporales, y en la aportación de arena procedente de trasvase.

Por otra parte, para la reconstrucción del muro, se realizará un pequeño reajuste de la plaza, que permita retranquearlo respecto de su posición actual. El vertido de arena se realizará en la zona de las Cuevecillas. Posteriormente, el transporte litoral se encargará de su desplazamiento hacia la playa de Balerma, aseguran desde Costas.