Detenido un empresario gallego que tenía proyectos en la provincia

La magistrada del Juzgado de Instrucción Número 3 de Ribeira (Galicia) ha decretado el ingreso en prisión del empresario Alejandro Dávila, al que se le imputan presuntos delitos de blanqueo de capitales, fraude en la consecución de subvenciones y estafa documental. El juzgado número 4 de Cádiz ya investigaba la supuesta estafa cometida por el empresario gallego Dávila Oubiña, quien podría haberse quedado con 15 millones de euros de ayudas a la reindustrialización de la bahía de Cádiz -ayudas del Plan Bahía Competitiva- y que tenía proyectos en la provincia de Almería. Supuestamente el empresario cobró ayudas para desarrollar proyectos que nunca llevó a cabo.
El empresario y otras dos personas más han sido ya detenidos fruto de la investigación del grupo de blanqueo de capitales de la Udyco (Unidad de Drogas y Crimen Organizado del Cuerpo Nacional de Policía) con sede en Sevilla, y que mantiene desplazados en Galicia a varios de sus agentes.
Dávila Ouviño también tenía proyectos en la provincia de Almería, donde en octubre de 2009, presentó personalmente a los entonces delegado de Agricultura y alcalde de Carboneras, Juan Deus y Cristóbal Fernández respectivamente, un proyecto para el cultivo intensivo de pulpo en Carboneras, en el que pretendía invertir 50 millones de euros a través de la empresa gallega Aquasystemas, Acuicultura y Medio Ambiente.
El objetivo de aquel proyecto era el de introducir de manera controlada especies de pulpo para su cultivo intensivo en la costa.
Entonces, los promotores del proyecto vendían el proyecto como pionero en el mundo, no sólo por sus características, sino también por sus dimensiones, ya que el cultivo de la nueva especie de pulpo que pretendía introducir nunca se había realizado. Los 50 millones de inversión de los que hablaba Dávila Ouviño para aquel proyecto de cultivo intensivo de pulpo no incluían el coste de los terrenos ni un circulante de 10 millones de euros para una producción anual de pulpo de 1.500 toneladas.
Ya había terrenos para la instalación de la planta y, de hecho, el propio Dávila Oubiño los visitó, acompañado de otro miembro de su empresa, el alcalde de Carboneras, el delegado de Agricultura y un representante de la agencia IDEA. De haberse llevado a cabo, el proyecto se marcaba crear 40 puestos de trabajo directos y otros 100 indirectos. Pero nunca se llegó a hacer.