G. Ruiz
22:52 • 22 nov. 2011
Tres operarios de la desaladora del Bajo Almanzora, situada entre las pedanías cuevanas de Villaricos y Palomares, resultaron heridos de diversa consideración en la madrugada de ayer martes al romperse una tubería de presión de la planta. El accidente se produjo a las 00.30 horas cuando una de las tuberías de presión con filtroreventaba y despedía a tres empleados, causándoles heridas de diversa consideración.
Los heridos, identificados como A.G.P., A.F.R. y D.S.L., de entre 30 y 35 años de edad, fueron evacuados hasta el hospital La Inmaculada de Huércal-Overa. Según explicó ayer a LA VOZ el alcalde de Cuevas del Almanzora, Jesús Caicedo, uno de ellos fue dado de alta a las pocas horas y los otros dos quedaron ingresados, uno en la unidad de observación del centro hospitalario y otro, cuyo estado revestía mayor gravedad, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.
De reciente inauguración
Las causas de este accidente aún se están investigando. Los vecinos consultados por este diario manifestaban que ya son muchas las desgracias que se están produciendo en la zona, aunque en esta ocasión no hay que lamentar víctima alguna, pero sí comentan que no entienden como puede ocurrir algo así en unas instalaciones que han sido inauguradas recientemente.
La Sociedad Estatal de Aguas de la Cuenca Mediterránea (Acuamed), de quien depende esta depuradora, indicó ayer que el accidente fue ocasionado por un “desajuste” en la operación “de los recuperadores de energía de los bastidores” utilizados para producir agua desalada.
El ente, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), trasladó en un comunicado su apoyo al personal afectado por el siniestro y aseguró que el estado de salud de los trabajadores, de entre 30 y 35 años, no revestía gravedad pese a que resultaron afectados por “una proyección de agua a presión”.
Acuamed, en coordinación con la empresa encargada de la explotación y mantenimiento de la planta para la que trabajan estos operarios, subrayó que está pendiente en todo momento de cualquier novedad que pudiera producirse al respecto y afirmó que se esta estudiando “de forma rigurosa las causas concretas” que ha provocado el accidente para, de este modo, proceder a revisar las medidas de seguridad “adoptando nuevas que pudieran ser necesarias”. En esta línea, apuntó que, “al margen de las consecuencias personales”, el alcance material del accidente “ha sido mínimo” y no ha afectado, al resto de los equipos, por lo que continúa el funcionamiento normal de la planta desaladora.
Los heridos, identificados como A.G.P., A.F.R. y D.S.L., de entre 30 y 35 años de edad, fueron evacuados hasta el hospital La Inmaculada de Huércal-Overa. Según explicó ayer a LA VOZ el alcalde de Cuevas del Almanzora, Jesús Caicedo, uno de ellos fue dado de alta a las pocas horas y los otros dos quedaron ingresados, uno en la unidad de observación del centro hospitalario y otro, cuyo estado revestía mayor gravedad, tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.
De reciente inauguración
Las causas de este accidente aún se están investigando. Los vecinos consultados por este diario manifestaban que ya son muchas las desgracias que se están produciendo en la zona, aunque en esta ocasión no hay que lamentar víctima alguna, pero sí comentan que no entienden como puede ocurrir algo así en unas instalaciones que han sido inauguradas recientemente.
La Sociedad Estatal de Aguas de la Cuenca Mediterránea (Acuamed), de quien depende esta depuradora, indicó ayer que el accidente fue ocasionado por un “desajuste” en la operación “de los recuperadores de energía de los bastidores” utilizados para producir agua desalada.
El ente, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), trasladó en un comunicado su apoyo al personal afectado por el siniestro y aseguró que el estado de salud de los trabajadores, de entre 30 y 35 años, no revestía gravedad pese a que resultaron afectados por “una proyección de agua a presión”.
Acuamed, en coordinación con la empresa encargada de la explotación y mantenimiento de la planta para la que trabajan estos operarios, subrayó que está pendiente en todo momento de cualquier novedad que pudiera producirse al respecto y afirmó que se esta estudiando “de forma rigurosa las causas concretas” que ha provocado el accidente para, de este modo, proceder a revisar las medidas de seguridad “adoptando nuevas que pudieran ser necesarias”. En esta línea, apuntó que, “al margen de las consecuencias personales”, el alcance material del accidente “ha sido mínimo” y no ha afectado, al resto de los equipos, por lo que continúa el funcionamiento normal de la planta desaladora.
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