‘Tacones’, el corto veratense que se abre paso en festivales internacionales

Una calle oscura, el silencio de la noche, el rumor de unos pasos en la lejanía, una silueta oscura a la vuelta de la esquina... el terror adopta una fisionomía que por desgracia es muy real para muchas mujeres en 'Tacones', el cortometraje del joven director veratense Juan Castro que ha sido preseleccionado en el Bizarrya Short Film Festival de Portugal y en el Vochocinema Festival del Terror de México.

La obra, carente de diálogos y grabada en un plano secuencia de casi seis minutos, narra "el suceso terrorífico más común que hay en la actualidad y que ha habido probablemente en la historia de la humanidad: el acoso", afirma Castro. El director, de origen colombiano pero criado en Vera, tenía claro que quería hacer una historia de terror alejada de los tópicos del género, de los exorcismos y fantasmas que abundan en las grandes pantallas pero que nunca protagonizan los miedos reales de las personas.

La cinta nos pone en la piel (o mejor dicho, en los tacones) de una mujer que vuelve a casa sola por la noche tras una fiesta. Una escena muy común en España que ha sido utilizada por el movimiento feminista para ejemplificar y denunciar el acoso y el intenso miedo que sienten miles de mujeres al caminar a solas tras la caída del sol por las calles de sus pueblos y ciudades, un problema que tradicionalmente muchos han justificado culpabilizando a las propias mujeres por la supuesta imprudencia que supone estar en la calle a ciertas horas o con cierta vestimenta, pero que la sociedad cada vez tolera menos.

No obstante, aunque no niega cierto influjo feminista en su obra, Castro deja claro que la idea de Tacones es tratar el acoso no como algo específico de la mujer, sino como un problema que afecta en general al ser humano, aunque se utilice el recurso del acoso al sexo femenino por ser, en la actualidad, uno de los más graves y flagrantes que se dan en nuestra sociedad.

"Lo habrás vivido tú, lo he vivido yo, como lo ha vivido todo el mundo, el ir andando por una calle sola de noche es lo que da más miedo, más miedo que los fantasmas. Que te pueda aparecer alguno o alguna y te arruine la vida. Esta situación se agrava más cuando estamos hablando de una mujer, no por nada, sino porque biológicamente el hombre se desarrolla con muchísima más fuerza y muchísima más brutalidad y por temas sexuales la mujer es la que más sufre este tipo de acoso, por eso hemos querido centrarlo en la mujer", aclara el director.

Precisamente por eso Tacones es una obra con vocación internacional, porque apela a un problema que se entiende a lo largo y ancho del globo, sin necesidad de diálogos. Castro, que ya lo ha presentado a más de un centenar de festivales, espera que tenga un impacto lo más global posible . "Lo que buscamos es dar un gran recorrido por todo el mundo, prefiero que se proyecte en un festival en cada país que en veinte en Brasil, México o Francia. Queremos que haya un recorrido lo más internacional posible, porque al ser un cortometraje que no tiene diálogos es un cortometraje internacional, además de que aborda un tema que es totalmente internacional", enfatiza Castro.

El joven director, que ya se dio a conocer localmente en 2018 tras ganar con su corto 'Segunda oportunidad' los premios Bayra 48h del jurado y Bayra 48h del público en el Festival de Cine en Corto "Ciudad de Vera", ya ha logrado que su última obra, de corte más profesional que las anteriores, sea preseleccionada en un tercer festival: el One Shot Terrassa City of Film de Terrasa (Cataluña), pero espera llegar a muchos más certámenes cinematográficos para dar a conocer su arte.

El equipo tras las cámaras lo completan el realizador mojaquero Samuel Marks, parte imprescindible de la obra que ha colaborado tanto en la redacción del guion como en la fotografía y el montaje del corto; la actriz María Ferriz, que expresa magistralmente y sin necesidad de articular palabra ese terror demasiado real que acecha a la vuelta de la esquina; el actor Joel Martínez, que encarna el origen de todos esos miedos; mientras que el sonido corre a cargo de Óscar Gagliardi y de la música, una melodía que enfatiza la inquietud que transmite el metraje, se ha encargado el compositor cinematográfico David Miralles.