Las Vías Verdes son infraestructuras ferroviarias recicladas como itinerarios no motorizados que articulan una oferta turística sostenible en el territorio. Frecuentemente atraviesan Espacios Naturales Protegidos, Red Natura 2000 y Geoparques. Sin embargo, hasta el momento no ha existido una integración y puesta en valor de la Biodiversidad en el entorno de las Vías Verdes de manera específica y detallada.
Vías verdes Del antiguo tren minero entre Lucainena de las Torres y Agua Amarga heredamos uno de los itinerarios más auténticos por el interior almeriense. A la sombra de la sierra de Alhamilla y al compás de la rambla de Lucainena recorreremos las tierras del sol entre cortijadas, silencio, desierto, soledad, montañas y barrancos, alabando todo color y vegetación que sale al paso.
La vía Verde de Lucainena arranca en la antigua estación de ferrocarril, hoy rehabilitada en escuela. Es fácil de localizar, pues será el primer edificio que nos saldrá al paso al entrar en el bonito casco urbano de Lucainena desde la carretera A 370.
Otra de las vías verdes de la provincia pasa por la vega del río Almanzora resulta un vergel de cultivos rodeado por tierras resecas y espartanas. Siempre haciendo camino por la orilla izquierda, la vía ofrece magníficas panorámicas a la meridional sierra de los Filabres, con sus laderas de pinos y sus cumbres, de más de dos mil metros de altura, teñidas de blanco en invierno. Nacimiento de agua templada El Aljibe (Fuencaliente).
Del antiguo ferrocarril Guadix-Almendricos también se han recuperado los tramos de Baza en la provincia de Granada y Cantoria en Almería. El tramo murciano en el T.M. de Lorca está actualmente en obras entre la pedanía de Almendricos y el límite provincial con Almería.
Por sierras silvestres y con el contraste de los cultivos hortofrutícolas en un entorno árido nos encontramos con la vía verde V.V.del. FC.Guadix-Almendricos. (Almendricos-Huércal-Overa). Esta vía verde bordea la espartana sierra de Enmedio, traza largas rectas que atraviesan sucesivas ramblas en la planicie hortofrutícola y, tras superar el entorno urbano de Huércal-Overa, finalmente se retuerce en las laderas de la Sierrecica. Este tramo cuenta con dificultades en la rambla de los Pelegrines (km 0,4). La falta de puente obliga a superar empinadas (pero cortas) rampas de bajada y subida. Entorno árido de esparto, aromáticas y matorral donde el riego por goteo obra el milagro de campos agrícolas de cítricos, olivos, almendros y huertas.
En los extremos de esta vía verde se bordean sierras de aspecto silvestre: al este nos encontramos con la sierra de Enmedio (espacio protegido de interés comunitario) con sus laderas de esparto y ramblizos terrosos; en el lado opuesto, al oeste situamos La Sierrecica cubierta por gran arbolado.
Contenido ofrecido en colaboración con la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía.
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