El huerto de la Escuela Infantil de Las Norias inspira a otros centros de Europa

Son muchas las ocasiones en las que desde esta tierra se mira o apela a Europa para ensalzar o aprender determinadas prácticas en ámbitos concretos. Sin embargo, también hay otras ocasiones en las que ocurre el fenómeno opuesto y son otros países los que quieren conocer de cerca el modo de hacer o la manera de abordar diferentes cuestiones que tenemos en nuestro país.

Y un ejemplo de este segundo caso se ha dado esta semana en la Escuela Infantil Sol de Portocarrero, que es un centro educativo situado en Las Norias de Daza, en El Ejido, y que ha acogido durante tres días a docentes llegados de cinco países europeos: Letonia, Estonia, Bulgaria, Grecia y Bélgica.

“Se han llevado una impresión estupenda y la verdad es que la experiencia ha sido muy enriquecedora”, explica Almudena Rico, directora de la Escuela Infantil.

Programación
Los tres días que han pasado por tierras ejidenses estos visitantes europeos han dado para mucho, con visita a un invernadero o la Colección Arqueológica de El Ejido incluidas. Aunque lo principal era ver de cerca la forma de trabajar en el centro educativo. “Hemos hecho seminarios para explicarles el sistema educativo español y la metodología de trabajo de nuestro centro que, además, es muy innovadora, con aprendizaje basado en proyectos y los rincones de juego asociados”, indica Almudena Rico.

No obstante, la principal atención ha estado centrada en la implementación de las actividades ‘STEAM’ (ciencias, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas) a la práctica diaria por parte de la Escuela Infantil Portocarrero. Y es que, en este sentido, hay que reseñar que este intercambio de experiencias educativas forma parte del proyecto Erasmus+ K229, ‘The child is a researcher and a practitioner’, que es una iniciativa que ha tenido como primera parada nuestro país.

Y en cuanto a las cuestiones diferenciales aportadas por la escuela de Las Norias en esta materia destacan tanto el huerto como el aula de naturaleza que el centro trabaja al aíre libre dentro del recinto destinado al patio. De hecho, Almudena Rico reconoce que “a través de ellos hacemos diferentes actividades en ese entorno para que los niños vean el valor de la riqueza de nuestra zona. Y ha los docentes que nos han visitado les ha sorprendido como salimos bastante a la zona del patio a trabajar y, sobre todo, les ha encantado como aplicamos el conocimiento del entorno y la calle a la clase y al aula”.

Por otra parte, también es importante destacar la buena acogida otorgada por los alumnos de Las Norias a los ‘profes’ llegados desde puntos tan diferentes. “Los niños han estado encantadores y acogedores. Hemos preparado talleres y ellos mismos han sido los que han mostrado el trabajo que hacemos en el centro”, destaca Rico. 

Por tanto, nueva muestra de cooperación y multiculturalidad de una localidad en la que conviven gran variedad de nacionalidades y de un centro que el año pasado obtuvo el ‘Premio andaluz a la cultura de Paz y la Convivencia’.