José Antonio Arcos
07:00 • 29 mar. 2012
Era el año 1999 cuando se constituyó como empresa el CIM, Centro Integral de Mercancías de El Ejido, una sociedad anónima mixta (60% capital municipal y 40% iniciativa privada) con el objetivo de llegar a construir una ciudad del transporte junto a la autovía A-7, a su paso por la capital de la hortofruticultura mundial. Hoy día, aquel ambicioso proyecto es ya una realidad.
El CIM tiene su estructura cuasi definitiva, a falta tan solo de que se levante un hotel orientado a dar servicios a los profesionales del transporte, y a que la firma Volvo desarrolle los terrenos que en su día compró. El resto del complejo está consolidado, y en el bulle a diario una incesante actividad: talleres, lavadero, agencias de transporte, gasolinera y todo tipo de empresas vinculadas a la logística y al transporte por carretera.
“Nuestra idea es aunar en este lugar todo el transporte del municipio y del Poniente porque estamos en un punto neurálgico para poder concentrar esta actividad”, describe Laura Cantón, gerente del Centro Integral de Mercancías desde 2009.
El CIM suma 45 naves de 500 metros de parcela cada una de ellas, y 800 metros de edificabilidad (lo que posibilita una doble planta); 420 plazas de aparcamientos, unos 72.000 metros cuadrados (los techos están aprovechados con paneles fotovoltaicos); y un edificio de empresas de cuatro plantas más bajo que tiene una capacidad de 70 oficinas.
Según explica la gerente, el nivel de ocupación alcanza el 60%, lo que quiere decir que éste es el porcentaje de naves industriales que ya han sido vendidas y de oficinas que también han sido adquiridas por distintas empresas. El CIM ocupa una superficie de 10 hectáreas en la zona de Santo Domingo, muy cerca del Estadio del Poli Ejido, y junto a una de las salidas de la autovía. “Queremos ser un nodo de comunicaciones referente”, añade Laura Cantón.
El CIM tiene su estructura cuasi definitiva, a falta tan solo de que se levante un hotel orientado a dar servicios a los profesionales del transporte, y a que la firma Volvo desarrolle los terrenos que en su día compró. El resto del complejo está consolidado, y en el bulle a diario una incesante actividad: talleres, lavadero, agencias de transporte, gasolinera y todo tipo de empresas vinculadas a la logística y al transporte por carretera.
“Nuestra idea es aunar en este lugar todo el transporte del municipio y del Poniente porque estamos en un punto neurálgico para poder concentrar esta actividad”, describe Laura Cantón, gerente del Centro Integral de Mercancías desde 2009.
El CIM suma 45 naves de 500 metros de parcela cada una de ellas, y 800 metros de edificabilidad (lo que posibilita una doble planta); 420 plazas de aparcamientos, unos 72.000 metros cuadrados (los techos están aprovechados con paneles fotovoltaicos); y un edificio de empresas de cuatro plantas más bajo que tiene una capacidad de 70 oficinas.
Según explica la gerente, el nivel de ocupación alcanza el 60%, lo que quiere decir que éste es el porcentaje de naves industriales que ya han sido vendidas y de oficinas que también han sido adquiridas por distintas empresas. El CIM ocupa una superficie de 10 hectáreas en la zona de Santo Domingo, muy cerca del Estadio del Poli Ejido, y junto a una de las salidas de la autovía. “Queremos ser un nodo de comunicaciones referente”, añade Laura Cantón.
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