El nuevo Club Social de Macenas abrirá en julio con zona comercial y de ocio

Una de las mejores noticias para el turismo en el Levante almeriense llegará en el plazo aproximado de un mes, cuando se inaugure el nuevo Club Social de la urbanización de Macenas, un ambicioso proyecto que lleva consigo un restaurante, cafetería, piscina, centro deportivo, centro de estética y belleza y zona comercial con supermercado, tiendas de moda, souvenirs y decoración.

La compañía promotora, la Family Office del Grupo Cosentino, calcula que a finales de julio podrá estar en funcionamiento dándole la vida a la zona residencial que está también en desarrollo urbanístico de nuevas parcelas.

El nuevo restaurante será regentado por los responsables de un chiringuito histórico en la playa de Mojácar, el Kon Tiki, en Vista de Los Angeles. Durante estas últimas semanas se pueden ver decenas de vehículos y de trabajadores ultimando los trabajos en la zona alta de la urbanización para que el estreno del Club Social y la zona comercial de Macenas sea  una realidad en   las próximas semanas. Junto al estreno del Club Social, la dirección de la Family Office, comandanda por Alvaro de la Haza, trabaja también en la selección de una marca hotelera que gestione el futuro hotel de lujo de la urbanización que podría estar abierto en el verano de 2025.  

También corresponde a una nueva fase toda la labor de recuperación del campo de golf de 18 hoyos y la Casa Club que ya fue inaugurada hace más de una década de forma efímera.  Cosentino compró Macenas a la Sareb o Banco Malo hace ahora justo un año y a finales de diciembre presentó en Madrid su proyecto para desarrollar este espacio único en la provincia, sobre un promontorio, enfrente del mar abierto.

La idea, además del hotel de cinco estrellas, es promocionar suelo para 400 viviendas, además de las 300 que hay ya habitadas. Todos estos proyectos implican una inversión global de 200 millones de euros que crearán 180 empleos directos.

El plan conllevará también la inversión en las infraestructuras necesarias para un desarrollo sostenible: depuradora de aguas residuales y la ampliación de capacidad eléctrica del sector.

Las obras de este macrocomplejo residencial de Macenas comenzaron a través de la compañía catalana Med Group, con el apoyo inversor del financiero George Soros, en 2004. Desde 2008, la urbanización Playa Macenas entró en una situación financiera muy delicada con motivo de la crisis financiera mundial, entrando en concurso de acreedores y recalando sus activos en diferentes entidades por adjudicación, entre ellas la Sareb.

El objetivo de la familia Cosentino, al adquirir estos activos, es convertir Macenas en un destino turístico con personalidad propia, basado en el respeto al medio ambiente y al uso eficiente de los recursos.

La propiedad de Cosentino en Macenas alcanza al 70% del total de la finca, y que supondrá revitalizar un espacio único en la costa acosado por las sucesivas crisis financieras.

Aún queda por dilucidar qué pasará con la estructura de hormigón del proyecto  de hotel en primera línea de  playa que pertenecía a la empresa Med Group.

Un bolsillo de Macael sale al rescate de la finca

La Sareb, tras años de atasco y de fallidas subastas por parte de la Hacienda Pública, sacó a la venta Macenas en 2020 por 30 millones de euros, incluyendo suelo para 970 viviendas y el campo de golf. Antes tuvo que ejecutar la hipoteca fallida de Bankia, Catalunya Caixa y Caja Granada por valor de 7 millones y adjudicarse el activo. Para comercializar este imponente complejo la Sareb fichó a la americana Richad Elllis, pero la solución ha llegado al final de un bolsillo de Los Filabres. Pocas fincas en el Levante provincial han sido durante tanto tiempo objeto de deseo como Macenas, la playa más alejada, más salvaje, de los veinte kilómetros de costa mojaquera.