Conoce la leyenda de Ánimas que sorprendió a 4 decenas de vecinos

Si en la medianoche del 1 de noviembre, sientes un frío intenso que recorre tu cuerpo y olismeas un extraño hedor a cera quemada en el ambiente, a pesar de no tener ninguna vela encendida...podrías estar pasando por la ‘Procesión de las ánimas Benditas de Cuevas del Almanzora’.

Cuenta la leyenda que estas almas del purgatorio, cumplen su estación de penitencia y cada 1 de noviembre se reúnen en la explanada de detrás del Castillo del Marqués de los Vélez en Cuevas del Almanzora a unos 200 metros del antiguo cementerio, para salir en procesión hasta llegar a la calle Estación. Una calle que posee este nombre precisamente por dicha leyenda, refiriéndose a la “estación de penitencia que cumplen estas almas en pena".

Pues todo este recorrido lleno de misterio y algo de respeto fue el que pudieron seguir paso por paso hasta cuatro decenas de cuevanos la pasada madrugada del 1 al 2 de noviembre, con motivo de la programación cultural de otoño de Cuevas del Almanzora. La técnico de Turismo Isabel Simón, acompañó a los vecinos relatando esta historia que ha pasado de boca en boca a través de los siglos hasta día de hoy. “Mucha gente joven no conoce esta leyenda y muchos se sorprenden cuando la escuchan”, aseguró Isabel.

Según explicó la profesional, las campanas de la iglesia de la Encarnación y la del Convento de San Francisco doblaban a media noche para conmemorar el Día de Todos los Santos, para que la gente recordase a quien ya no estaba y que recapacitasen los vivos de la bondad de la vida.

Este era el momento justo en el que las ánimas se reunían en esta explanada, ataviados con sudarios, capuchas y un cirio encendido en sus manos, simbolizando esa luz eterna que quieren alcanzar estas almas del purgatorio. “Cuando están todos formados comienzan a desfilar en dos filas, pero una de las peculiaridades de esta procesión, es que en la parte de atrás hay un grupo de ánimas con sudarios muy nuevos y blancos y sin cirios en las manos, esa gente son los cuevanos que en el próximo año van a fallecer” relató Isabel.

Estando en la visita guiada, algunos vecinos sintieron algo de respeto por aquello de que la leyenda cobrase algo de realidad. Durante el recorrido, los más supersticiosos no querían permanecer en la parte de atrás del grupo, “porque los de atrás ya saben lo que les toca”, bromeaban haciendo alusión a esos nuevos difuntos que irían tras las ánimas.

Esta procesión no es visible para los vecinos, ya que estaríamos hablando de seres de otro mundo, pero cuenta la leyenda que cuando pasabas cerca de estas ánimas “un frío recorre tu cuerpo y un sorprendente olor a cera quemada llegaba hasta las narices de quienes con estas se cruzaban”. Son unos cuantos los cuevanos y cuevanas, que relatan desde hace años atrás que han sentido este frío, o han confesado tener la premonición de ir en esa “procesión”.

La actividad ha sido tal éxito, que desde el Consistorio no descartan volver a hacer una visita guiada por esta leyenda de cara a diciembre, “la gente no para de preguntarnos nuevas fechas y tienen muchas ganas de oír esta leyenda”.