Rebelión de los moriscos, el último rey de la Alpujarra y tapas en Ugíjar

El próximo domingo día 17 de diciembre a las 11:00 horas en la plaza de la Iglesia de Ugijar tendrá lugar la IV Recreación Histórica  de la Rebelión de los Moriscos en la guerra de la Alpujarra en Ugijar y la Coronación y Muerte de Abdala Aben Aboo, el  último rey de la Alpujarra y la IV Ruta de la Tapa Cristiana y Morisca.

Esta recreación está sacada de los capítulos de la historia de la Rebelión de los Moriscos del Reino de Granada, obra del cronista de la guerra de las Alpujarras Luis del Mármol Carvajal, guion teatral de Nuria Martín Sánchez que dedica a Ugijar y del libro de Abdala Aben Aboo, el último rey de la Alpujarra, libro de Juan Mesa Esperindon, basado en los cronistas de la guerra.

En esta recreación se reviven los acontecimientos que tuvieron lugar en Ugijar desde la rebelión de los moriscos, el 24 de diciembre de 1568, hasta la aparición de la Virgen en el pozo en 1606.

Los dirigentes moriscos preparan la rebelión ante la nueva pragmática de Felipe II de 1566, que pretendía la asimilación de la cultura musulmana por la cristiana de su religión y costumbres. El alzamiento se produjo el 24 de diciembre de 1568 donde participan los principales líderes moriscos: El Zaguer, Aben Aboo, Aben Farax, el Partal…

En la primera fase conquistan la casa de D. Pedro López, escribano mayor, que se cree que es la casa actual de Bernardo Reinoso y la de Miguel de Rojas, se tiene como probable la Casa de los Tovares, no pudiendo hacer nada el alcalde mayor, el abad y el alguacil mayor.

Aben Farax, sanguinario monfí, habiendo tomado las torres y ya con rehenes, se dirige a la Iglesia, donde se refugian 240 cristianos. Tras un asedio y rotas la negociaciones, todos los cristianos murieron y se vejaron las imágenes, quemando la Iglesia.

No hubo piedad para los inocentes. Gonzalico, el niño mártir de diez años que instó a los cristianos a no convertirse al Islam y a morir como mártires, fue asesinado llevándolo a golpes hasta Lucainena. La Santísima Virgen del Rosario sufrió humillación, fue quemada y arrastrada atada a la cola de un caballo, hasta un pozo donde fue arrojada.

La tradición afirma que pasaron unos años hasta que el dueño del pozo, limpiándolo por la sequia, descubrió a la Virgen, que exclamó: “Martirio soy, Martirio me llamo“. A partir de ese momento cambió la advocación de la Virgen del Rosario por Virgen del Martirio y desde 1606 es la Patrona de Ugijar y de la Alpujarra, por acuerdo del Concejo de Ugíjar.

Coronación y muerte de Abdalá Aben Aboó, último rey de la Alpujarra, y ruta de tapas

D. Fernando de Córdoba y Válor fue coronado rey por los moriscos, debajo de un olivo en una finca de Narila con el nombre de Muley Aben Humeya. Conocido como Aben Humeya, dirigió la sublevación hasta el 20 de octubre de 1569, donde fue asesinado en Laujar de Andarax. Le sucede como rey su primo, con el nombre de Muley Abdalá Aben Aboó, conocido como Aben Aboó.

De nombre cristiano Diego López Abenabo, fue beneficiado de Mecina Bombarón, y ocupa su lugar como nuevo rey de los andaluces (1569-1571), siendo reconocido y apoyado por el sultán de Argel (Alluc Alí). En su estandarte rojo figuraba el lema que adoptó: “No pude desear más ni contentarme con menos”. Conquista Serón y Órgiva; y logra reunir un ejército con más de 10.000 soldados con el que llega hasta Alhendín, a las mismas puertas de Granada, y manda emisarios para sublevar los reinos de Murcia y Valencia.

Por otro lado, Felipe II llama a su hermanastro, D. Juan de Austria, y lo nombra Jefe Supremo, que con los Tercios de Flándes logra sofocar la rebelión, con un ejército al final de la contienda de 46.000 soldados y artillería: la suerte estaba echada. En septiembre de 1570 se inicia el asedio definitivo a las Alpujarras “a sangre y fuego”, talando los bosques, incendiando los campos, y degollando a cuantos moriscos se cruzaban en su camino.

Aben Aboó intenta desesperadamente tomar Salobreña y Almuñecar para recibir refuerzos por mar, pero no lo consigue. El combate final tuvo lugar entre Ronda y Sierra Bermeja en 1571, frente al Duque de Arcos. Derrotado, se retira con los restos de su tropa a Mecina Bombarón. Finalmente, es traicionado y asesinado por Gonzalo El Xeniz en una cueva de Bérchules, en el pago del Huzum. De este modo, acabó la última lucha por la independencia, en una guerra desigual entre el poder del mayor imperio del mundo y un pueblo labriego, artesano, no belicoso y amante de su libertad.

Con  motivo de la recreación se realiza además una ruta de la tapa cristiana y morisca, en la que los bares y restaurantes del municipio colaboran con especialidades de la cultura árabe y cristiana. Se establece un recorrido por los bares y se sella el rutero con un minimo de seis bares, entrando en el sorteo de fantásticos regalos.

Esta recreación pretende implantar un nuevo modelo de turismo cultural e histórico basado en la divulgación del patrimonio inmaterial del municipio de Ugíjar; implicar a actores y vecinos en los procesos de recreación; fomentar la igualdad de género, fomentando la participación de mujeres; acercar la historia de una manera viva y más activa; profundizar en el conocimiento del siglo XVI y revivirlo; implicar y dar a conocer a la Asociación de Mujeres y a los jóvenes lo que supuso la guerra de la Alpujarra; y una oferta turística complementaria al turismo cultural e histórico para disfrutar de patrimonio inmaterial de la historia.